Mapa del proyecto H2Med.

Mapa del proyecto H2Med. Diseño: Arte EE / iStock, H2med.

Observatorio de la Energía

Primeros problemas para construir el H2Med: la falta de regulación dificulta decidir el diseño final del proyecto

El proyecto del corredor de hidrógeno verde entre Barcelona y Marsella se presenta en Bruselas el 15 de diciembre para conseguir financiación.

15 diciembre, 2022 03:01

Se acaba el plazo para presentar en Bruselas este jueves 15 de diciembre el proyecto del hidroducto (o hidrogenoducto) H2MED, el corredor submarino que se quiere construir para unir Barcelona y Marsella (Francia).

Sin embargo, fuentes conocedoras del proyecto han explicado a EL ESPAÑOL-Invertia que "se está haciendo un poco a ciegas". La prisa es que la Comisión Europea debe decidir qué financiación recibe, y el Gobierno pretende que sea el máximo (50%). 

"Hasta la fecha, no se ha hecho un hidrogenoducto semejante y de esta envergadura en ninguna parte del mundo, y encima en Europa no hay ninguna regulación que determine los requisitos o condiciones bajo los que hay que diseñar el tubo".

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Desde el punto de vista técnico es igual a un gasoducto. Son infraestructuras iguales que se construyen igual, según ha consultado este diario. La única diferencia es transportar distintos gases: uno es hidrógeno y otro gas natural. 

"Aunque hay pequeñas diferencias fácilmente salvables", explica Albert Mitjà, director de negocio de H2 en Indox Energy Systems. "La molécula de hidrógeno es más pequeña y menos densa. Por eso, el sellado de las tuberías debe ser más restrictivo que para el gas. En cualquier caso, y aún siendo el hidrógeno más exigente, plantea un tema más geopolítico que técnico". 

Problemas en el diseño

No hay grandes dificultades técnicas, pese a que el hidrogenoducto se introduce unos kilómetros Mediterráneo adentro y se aleja de la costa. Es una ruta que mide unos 455 km y que se enfrentaría a una profundidad máxima de 2.557 metros. 

"El problema es que no existe ninguna regulación que defina cuál debería ser la sección de cada uno de los tubos, cuál la presión a la que se debe transportar el hidrógeno o la cantidad de energía que debería ser capaz de transportar", explican las fuentes conocedoras.

Tampoco se conoce "cuánto hidrógeno España va a ser capaz de producir para enviar a Francia, ni cómo va a gestionar ese volumen a su llegada. No se sabe nada, no hay regulación de cómo se tiene que hacer un hidrogenoducto". 

En función de esas variables, los ingenieros de los operadores de las redes gasistas de España y Francia (TSO Enagás, Teréga y GRTgaz) deben diseñar este primer plan.

"Actualmente, si se toma como referencia las especificaciones del transporte de gas (transporte primario), -no la red de distribución-, la Ley del Sector de Hidrocarburos establecía que se debería introducir a 80 bares de presión", apuntan las fuentes.

Y añaden: "El hidrógeno también puede inyectarse a 80 bares de presión, pero dependerá de cuánta cantidad de energía por unidad quieren los reguladores que transporte".

Falta de renovables

Albert Mitjà, por su parte, resalta que "España tiene un problema de falta de potencia renovable muy importante".

Y concreta:"Si se espera que en 2030 el H2MED transporte 2 millones de toneladas de hidrógeno verde al año, se necesitaría añadir hasta 20 GW de renovables solo destinados a la producción de hidrógeno, además de todos los objetivos de electrificación que se ha propuesto en el PNIEC".

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"Eso sin contar con que Francia querrá que su hidrógeno producido por sus centrales nucleares también sea considerado verde y que, al final, sean ellos los que nos envíen el combustible", concluye.

Aunque no hay hidrogenoductos de las dimensiones de H2MED, si se puede tomar como referencia el proyecto que está desarrollando Redexis en el marco del proyecto Green Hysland Mallorca. 

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"Nuestro hidrogenoducto tendrá una longitud de 2,7 kilómetros y se unirá al sistema gasista desde la planta de Lloseta", explica Miguel Mayrata, director de Diversificación de Negocios de Redexis a este diario.

"De hecho, acabamos de recibir la autorización para la primera instalación de inyección de hidrógeno verde en España, que se mezclará con el gas natural para llevarlo a toda la isla".

Con esta experiencia, Redexis recuerda que "demostramos así que tenemos experiencia en construir este tipo de infraestructuras, siendo pioneros, y por tanto, estamos abiertos a cualquier proyecto de ingeniería puntera en el sector del hidrógeno verde".