El grupo químico alemán Covestro, antigua filial de polímeros de Bayer, registró un beneficio neto atribuido de 615 millones de euros en el primer semestre del año. Este dato representa una bajada del 27% en comparación con el resultado contabilizado en el mismo periodo de 2021, según ha informado la empresa.

Las ventas de Covestro entre enero y junio sumaron 9.386 millones de euros, un 29,2% más, impulsadas por una subida del 18,3% de los precios. Por su parte, los volúmenes crecieron un 0,5% y el tipo de cambio aportó un 6,1%.

Entre abril y junio, Covestro obtuvo un beneficio neto de 199 millones, un 55,7% por debajo de las ganancias del segundo trimestre de 2021. Las ventas de la multinacional aumentaron en este periodo un 18,9%, hasta 4.703 millones.

Situación actual

"Podemos mirar hacia atrás a lo que fue un segundo trimestre sólido en general (...) Sin embargo, miramos hacia una segunda mitad del año cada vez más desafiante", admitió Markus Steilemann, consejero delegado de Covestro, en referencia a la situación geopolítica.

Para Steilemann, la coyuntura actual muestra que "no hay alternativa" a la transformación hacia un panorama industrial sostenible y libre de fósiles.

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De este modo, Covestro espera que continuarán registrándose impactos en las cadenas de suministro globales, niveles muy altos de precios de la energía, alta inflación y un crecimiento más débil en la economía global.

Como consecuencia del sustancial aumento reciente de los costes energéticos y del mayor debilitamiento de la economía global, Covestro ajustó a finales de julio su perspectiva para el conjunto del ejercicio en curso.

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En esta nueva situación, la empresa prevé que su resultado bruto de explotación oscilará entre 1.700 y 2.200 millones de euros, cuando anteriormente esperaba alcanzar entre 2.000 y 2.500 millones.

Asimismo, Thomas Toepfer, director financiero de Covestro, advirtió de que, en la segunda mitad de 2022, los riesgos macroeconómicos han vuelto a aumentar significativamente.

Suministro de gas

Preocupan particularmente los altísimos costes de la energía y las incertidumbres en el suministro de gas en las instalaciones de la empresa en Alemania, que representan alrededor de la cuarta parte de la producción de la multinacional.

Por otro lado, Toepfer destacó que Covestro está tomando medidas para reducir sus necesidades de gas en Alemania a corto plazo. Además, pretenden mejorar las tecnologías de producción existentes y desplegar otras nuevas para reducir aún más el consumo de gas y energía.

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No obstante, reconoció que "si se racionan los suministros de gas en el transcurso del año", esto podría resultar en una reducción de la carga operativa o un "cierre completo" de las instalaciones de producción de Covestro.

"Debido a los estrechos vínculos entre la industria química y los sectores de downstream, es probable que un mayor deterioro de la situación provoque el colapso de cadenas completas de suministro y producción", advirtió.