Lo ha dicho hasta la propia vicepresidenta tercera y ministra del ramo, Teresa Ribera. Ha descartado sacar del pool toda la generación de renovables, biomasa y cogeneración con retribución específica para vincularla a los consumidores domésticos acogidos a la tarifa regulada y a la industria española mientras no haya "consenso".

"El MITECO se puso en contacto con todas las patronales de renovables para ver qué opciones había para bajar el precio de la luz a los hogares acogidos a la tarifa regulada, PVPC, y también para la industria, que está aumentando su pérdida de competitividad respecto a sus homólogos en Francia y Alemania", añaden las mismas fuentes.

"Y consenso no va a haber cuando algunas grandes energéticas, que suman un alto volumen de capacidad renovable en España, ven perjudicado su negocio si dejan de vender en el pool en un contexto de precios diarios tan altos", añaden las mismas fuentes. 

"El porcentaje de renovables que acude al mercado mayorista es muy pequeño, probablemente no llegue ni al 10%".

PPAs y subastas

Si se hacen las cuentas, salen. Según Javier Colón, gerente de la consultora Neuro Energía y experto en el sector energético, "hay que descontar los parques renovables que ya tienen un acuerdo PPA (Power Purchase Agreement)", un contrato bilateral a largo plazo de compraventa de energía. "Tienen una liquidación posterior a un precio fijo, así que les da igual el precio del pool".

También "hay que restar a los parques que tienen prima y, por tanto, están sujetos a una rentabilidad razonable. Ahora están ganando mucho, pero luego se les revisará en los próximos años y bien tendrán que devolver lo ganado o se les reducirá el periodo de prima". 

Y, por último, "los que están sujetos a las condiciones de las subastas de renovables, primero las de 2017", casi 8.000 MW entre eólica, fotovoltaica y biomasa, "y los de las dos últimas subastas de este año", otros más de 6.000 MW. 

En definitiva, "solo queda mirar qué empresa o empresas acuden al pool a vender su energía limpia y por qué ahora no les interesa salirse de un mercado que les puede salir tan rentable", añade Colón.

Pérdida de clientes

Y mientras eso ocurre en el lado de los vendedores, las renovables, en el lado de los compradores también ha habido una reacción en contra. La Asociación de Comercializadores Independientes de Energía (ACIE) ya ha trasladado al MITECO su rechazo a estas medidas, a las que denomina "intervencionistas" en el mercado eléctrico.

"Me hubiera parecido una barbaridad porque es una tarifa intervenida", apunta el responsable de Neuro Energía. "Acabaría con el sector de las comercializadoras independientes, si el Gobierno quiere hacer un segundo mercado debería permitir que todo el mundo pudiera acceder a ese descuento".

La asociación de comercializadoras, de la que forman parte Acciona, Repsol, Total, Engie o Feníe Energía, entre otros, se reunió con la Dirección General de Política Energética y Minas. Se le ha transmitido que la salida de las plantas RECORE (renovables, cogeneración y residuos) del mercado respecto del resto de tecnologías causaría unos perjuicios irreparables para las comercializadoras, tanto en su circulante como en el cumplimiento de las garantías del OMIE.

El presidente de la asociación, Javier Bescós, ha dicho que un trimestre "no debería justificar una medida que distorsionará las bases del mercado".

"La separación de las plantas RECORE podría suponer la ruptura de coberturas y contratos preexistentes con comercializadores, drenando nuestra capacidad de suministrar a precios competitivos cerrados en 2019 y 2020", ha añadido.

Así, ante "el riesgo latente" de modificar la actual tarifa PVPC, los comercializadores indican que "la implantación de una tarifa doméstica predatoria reforzaría la posición de los agentes históricamente dominantes, revirtiendo el proceso liberalizador en contra de la directiva europea 944/2019".