Las compañías responsables de distribuir el agua mineral por todo el territorio nacional están en la búsqueda constante de adaptar su modelo de negocio a la sostenibilidad y economía circular. La mayoría ya dispone de botellas fabricadas con plástico 100% reciclado y lanzan iniciativas como las máquinas dispensadoras de agua.

Este año, Bezoya, la marca de agua mineral natural de Pascual, dejará de utilizar plástico virgen en sus botellas. Todas estarán fabricadas con plástico 100% reciclado (rPET), es decir, a partir de otras botellas. Así, la marca reutilizará 7.000 toneladas de plástico, lo que equivale a alrededor de 280 millones de botellas de agua de 1,5 litros.

Además, ha lanzado dos nuevos modelos de negocio para seguir en la línea de la sostenibilidad: agua mineral natural en grifo para hostelería y dispensadores de agua en máquinas vending. La piedra angular de estos es su formato en caja 100% reciclable concectada a una fuente de agua de 12 litros.

Respecto al lanzamiento del grifo para dispensar agua en los bares y restaurantes, desde la compañía explican que las cajas de 12 litros están conectadas en batería a los nuevos grifos, permitiendo un ahorro de espacio y energía y eliminando la logística inversa, al no tener que retornar envases de vidrio. A la vez que se evita, también, el uso de plásticos. El consumo de energía es menor, ya que no se requiere del uso de neveras de gran capacidad para botellas de agua envasada.

"Los nuevos grifos de Bezoya no solo profundizan en nuestra estrategia de ofrecer el agua de la mejor calidad con el menor impacto ambiental posible, sino que también suponen una innovación para apoyar la recuperación del sector hostelero", afirma Eliecer Hernández, director del Negocio de Aguas de Pascual.

Con este lanzamiento, Bezoya presenta dos modelos de surtidor: uno con forma de columna octogonal y otro con forma de botella. El nuevo formato incorpora un sistema de doble grifo, que permite dispensar el agua mineral natural directamente en el local, a la vista del cliente.

Máquinas 'vending'

Bezoya presenta también un nuevo concepto para el acceso al agua mineral natural en una máquina expendedora. En este nuevo modelo único en España, el agua se sirve directamente desde la máquina, pudiendo el consumidor elegir la cantidad y el recipiente que utiliza.

Al igual que el nuevo modelo de hostelería, la máquina vending tendrá varias cajas conectadas en batería. Una vez acabado el agua de la máquina, el reponedor solamente tendrá que sustituir la caja por una nueva y conectar el grifo dispensador al adaptador de la máquina. La caja utilizada se podrá reciclar 100% en los contenedores destinados al cartón y al plástico, evitando la logística inversa y favoreciendo la circularidad.

La marca ha explicado que estas nuevas máquinas se ubicarán en centros comerciales, estaciones de transporte público, parques temáticos, oficinas, aeropuertos o en la calle, cubriendo una necesidad cada vez más demandada por los consumidores: poder reutilizar sus propios envases, fomentando la economía circular.

Cabreiroá

Por su parte, el manantial de Cabreiroá ha implementado desde hace años un nuevo modelo de negocio más sostenible y responsable. La marca pertenece a Corporación Hijos de Rivera también propietarios de Estrella Galicia y durante el año 2020 registró una facturación de 479,1 millones de euros, un 10% inferior al ejercicio anterior, en un año marcado por el coronavirus. Los beneficios de la compañía descendieron casi un 30%, situándose en 52,9 millones de euros después de impuestos.

Para implementar y llevar a cabo su nuevo modelo sostenible, Cabreiroá ha lanzado el 'Proyecto Origen', una apuesta decidida por la sostenibilidad que reafirma el enfoque de su negocio hacia el objetivo de generar un impacto positivo en su entorno con medidas como la neutralidad de carbono de sus instalaciones o su compromiso de que el 100% de los envases de Cabreiroá serán ecoenvases antes de final de año.

Recientemente, la marca anunció el lanzamiento del envase de cartón de ocho litros. El hecho de incluir más cantidad de agua, ocho litros en este caso, en una única bolsa dentro de una caja de cartón 100% reciclable permite disminuir en 60% el uso de plástico y dar "un gran salto" en términos de responsabilidad medioambiental. Además, decidió envasar en aluminio su agua mineral natural, ya que el aluminio es infinitamente reciclable.

La marca también ha invertido 2,5 millones de euros en envases de vidrio reutilizables y retornables para el canal de hostelería. Además, sus formatos PET han ido incorporando paulatinamente material reciclado a sus envases, y tanto en los formatos de un litro como de 1,5 litros ya alcanza el 100% de PET reciclado. Este proceso concluirá al final de 2021 con todos los formatos de todos los tamaños con el 100% de material reciclado.

Para el director del Negocio de Aguas de Hijos de Rivera, Álvaro García, la apuesta por la circularidad de los envases "es un camino sin retorno" por la demanda de los consumidores, que son "cada vez más conscientes de la necesidad de implicarse en generar un impacto positivo en el entorno".

Solán de Cabras

Otra de las marcas de agua presente en el mercado español es Solán de Cabras. Pertenece a la misma compañía que Mahou-San Miguel y durante el año 2020 su facturación se redujo un 10,5%, hasta los 1.252 millones de euros, y su ebitda alcanzó los 166,3 millones, un 43,7% menos.

Respecto a la estrategia de sostenibilidad, destaca que en 2021 la compañía contará con botellas de agua mineral natural hechas 100% de plástico reciclado, eliminando definitivamente el uso de plástico virgen. Con estas medidas, Solán de Cabras ha conseguido ahorrar desde 2017 más de 17.800 toneladas de plástico virgen, el equivalente a 3,4 millones de árboles absorbiendo CO2.

La compañía ha explicado que las nuevas botellas de 1,5 litros hechas 100% de otras botellas estarán disponibles a partir de septiembre de este año, y se sumarán a los formatos de 33, 50 y 75 centilitros hechos de plástico 100% reciclado, que se pueden encontrar ya a la venta.