Acosado por los escándalos de corrupción, Pedro Sánchez tampoco encuentra ya oxígeno en la Unión Europea, que en algún momento (de su primera legislatura) llegó a ser el refugio al que acudía para escapar del bloqueo en España y ponerse el traje de estadista de talla internacional.
El Gobierno de Sánchez ha sufrido este lunes un doble revés en Bruselas. Por un lado, la Comisión de Ursula von der Leyen le ha recortado 1.100 millones de euros del quinto pago de fondos Next Generation (cuyo importe total asciende a 23.000 millones) al no tener votos en el Congreso para sacar adelante medidas como la subida del diésel, una de las reformas clave que exigía Bruselas.
En paralelo, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, retiraba su candidatura a la presidencia del Eurogrupo tras constatar que no contaba con apoyos suficientes para derrotar al actual titular del cargo, el irlandés Paschal Donohoe, que desde el principio partía como favorito absoluto.
En cuanto a los fondos Next Generation, el Gobierno de Sánchez no ha sido capaz de sacar adelante una de las reformas clave comprometidas con la UE a cambio del quinto pago: la subida del impuesto al diésel para igualar su tratamiento fiscal con el de la gasolina. Y eso pese a que Bruselas le ha dado muchas facilidades: la principal, alargar de dos a casi siete meses el periodo de evaluación.
Tanto el impuestazo al diésel como el gravamen a las energéticas estaban incluidos en la reforma fiscal diseñada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pero fueron tumbados por el Congreso en noviembre de 2024 por la oposición del PP y Vox, así como la de Podemos.
El propio Sánchez prometió en diciembre aprobar un nuevo decreto para sacar adelante la subida del diésel, pero al final ha renunciado tras constatar que sigue sin apoyos suficientes para convalidarlo.
Los morados mantienen su rechazo con el argumento de que perjudicará especialmente a las familias trabajadoras. Por este motivo, Bruselas aplica una penalización de 460 millones de euros.
Las autoridades españolas tampoco han completado las inversiones comprometidas en la digitalización de las entidades regionales y locales, garantizando un acceso más fácil de los ciudadanos a los servicios públicos. Este incumplimiento se traduce en un recorte de 40 millones.
A ello hay que sumar que, tras la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE), Bruselas considera que España ya no cumple el hito sobre la reducción de la temporalidad en el empleo público, correspondiente a la primera solicitud de pago. El resultado es que el Ejecutivo comunitario rebaja otros 620 millones.
En total, un recorte de más de 1.100 millones de euros que se perderán de forma definitiva si el Gobierno de Sánchez no completa las reformas pendientes -incluido el impuestazo al diésel- en un plazo de seis meses.
Este quinto pago que se aprobaba este lunes acumula meses de retraso. Se esperaba para el segundo semestre de 2023.
España reclamó aplazar la petición porque hubo varias reformas que estaban congeladas ante la imposibilidad de aprobarlas en el Parlamento.
Finalmente, la solicitud se hizo en diciembre de 2024. Desde entonces la Comisión Europea viene negociando con España el cumplimiento de todos los hitos comprometidos.
De hecho, el Ejecutivo comunitario ha sido laxo a la hora de negociar con España, pues ha admitido adelantar algunas reformas comprometidas para pagos posteriores.
Al mismo tiempo, se ha permitido que otras cuestiones como la Ley del Suelo o la Ley de Familias -atascadas en las Cámaras- sean aplazadas.
Lo mismo ocurre con la reforma de los beneficios fiscales, que está congelada al no haber Presupuestos.
Se acaba la paciencia
Sin embargo, y pese a los distintos movimientos realizados por el Gobierno, a la Comisión se le ha acabado la paciencia y ha terminado multando a España por ser incapaz de cumplir con sus compromisos.
El escenario futuro se avecina complejo. Entre las condiciones para los siguientes pagos -que ya van muy apretados- hay toda una serie de normas que siguen en el aire como la Ley de Industria, la Ley de Equidad en el Sistema Sanitario, la Ley del Cine, la Ley de Transparencia e Integridad en las Actividades de los Grupos de Interés o la Ley de Movilidad.
La parálisis parlamentaria de Sánchez amenaza con provocar la pérdida de una elevada cuantía de fondos Next Gen.
El agotamiento en Bruselas con el Gobierno de Sánchez se deja ver también en cuestiones de funcionamiento de los órganos de la Comisión.
Así, Carlos Cuerpo no ha podido ni llegar a la final en la lucha por la presidencia del Eurogrupo. Ha tenido que retirarse para dar paso a una elección de "consenso", que permitirá al irlandés Donohoe ser reelegido para otros dos años y medio más.
El paso atrás de Cuerpo se ha producido en tiempo de descuento, a dos horas escasas de que se produjera la votación, tras intensos contactos con sus homólogos que se han prolongado "hasta última hora de este fin de semana".
En la derrota del ministro de Economía han pesado dos factores, que reflejan el aislamiento de Sánchez en la UE. El más importante es la disciplina militar del Partido Popular Europeo (PPE), que ha garantizado que todos sus ministros apoyarían al también popular Donohoe.
Así, el criterio ideológico o de pertenencia a la misma familia política se ha impuesto a otros factores que habían pesado más en anteriores ocasiones, como la brecha norte/sur. Incluso Grecia o Portugal tenían decidido el voto por Donohoe. En total, el PPE controlaba de entrada 7 votos, cuando la mayoría simple necesaria era de 11 votos.
Tampoco ha jugado a favor de Cuerpo la negativa de Sánchez en solitario a aumentar el gasto militar hasta el 5% en la reciente cumbre de la OTAN, que le granjeó las críticas en público de varios socios europeos, en particular los bálticos y del este. La financiación de la defensa está cobrando cada vez más importancia en las reuniones de ministros de Economía de la UE.
De hecho, los socialistas no sólo estaban en minoría sino que además se han dividido, ya que además de Cuerpo se presentaba el ministro lituano, Rimantas Sadzius, un halcón en materia de defensa. Al saber que el español abandonaba la carrera, Sadzius también se ha retirado, dejando despejada la vía para la reelección de Donohoe para un tercer mandato de dos años y medio.
"Después de semanas intensas de contacto con mis colegas, de recabar opiniones con mis compañeros ministros de finanzas del Eurogrupo y de conversaciones que han ido hasta última hora de este fin de semana, hemos llegado a la conclusión de que no teníamos garantizados los apoyos necesarios para llevar adelante la candidatura", se ha justificado Cuerpo a su llegada a la reunión.
"Esto, sumado además al momento complejo que vivimos -que exige un elemento de unidad y evitar la fragmentación en un órgano tan importante como es el Eurogrupo-, es lo que lleva, en un ejercicio de responsabilidad, a que haya decidido dar un paso al lado y favorecer una candidatura de consenso para la próxima presidencia del Eurogrupo", ha agregado.