Félix Gil, CEO de Integra Tecnología, durante Wake Up, Spain 2025!

Félix Gil, CEO de Integra Tecnología, durante Wake Up, Spain 2025! David Morales

Tecnológicas ENTREVISTA

Integra refuerza sus planes de expansión en España y defiende su modelo de crecimiento orgánico frente a las 'big tech'

Su CEO, Félix Gil, abraza la llegada de la inteligencia artificial como tecnología accesible para pymes y reivindica la libertad de elección a la hora de encarar proyectos de digitalización.

Más información: Félix Gil (Integra): "La consultoría y la formación ayudan a diferenciarse en la gestión del cambio digital"

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El próximo año, la consultora aragonesa Integra cumplirá 40 años. No es fácil encontrar enseñas españolas en la arena digital con este bagaje a sus espaldas, con su particular historia de crecimiento y expansión que ha ido evolucionando desde la formación hasta la consultoría tecnológica internacional.

La historia que nos ocupa arranca en Calatayud, una ciudad de menos de 20.000 habitantes, con un enfoque inicial centrado en formar a profesionales en la incipiente informática personal. Hoy, la panorámica se parece poco a aquella empresa: Integra cuenta con más de 120 áreas de competencia, presencia en múltiples comunidades autónomas y proyectos internacionales en más de 25 países.

"Hemos pasado de ser un pequeño gusano a convertirnos en mariposa", presume Félix Gil, la actual batuta de este grupo familiar. “Queremos reconocer el camino andado, que hemos recorrido con tres grandes ejes: las personas, los clientes y las alianzas”.

Lo que no ha variado en este tiempo es la aspiración de seguir explorando las fronteras de la tecnología y aterrizar esos avances en las empresas y organizaciones. Su propio CEO lo tiene claro (“La gestión nos asegura el presente, pero solo la innovación nos asegura el futuro”) y ello se traduce en una inversión constante en formación (“sin formación no hay innovación”) y en una política decidida de exploración técnica.

“Todos los años creamos alguna nueva línea de negocio o especialización importante”, introduce Félix Gil, en entrevista con DISRUPTORES - EL ESPAÑOL en sus oficinas de la capital aragonesa. Ejemplo de ello es la apuesta reforzada por la inteligencia artificial, que ha pasado a ocupar un lugar central en la estructura de la empresa: “Le hemos dado un paso más, ha subido de nivel, con una nueva dirección general y un equipo dedicado. La IA es ya parte del corazón de la compañía”.

Casi 40 años de historia

Desde sus inicios en 1986, Integra ha estado presente en la escena tecnológica de Aragón. Carlos Pascual, fundador y presidente de la empresa, tuvo la visión en aquel momento de combinar la formación con la incipiente era informática.

A medida que Integra crecía, diversificaba sus servicios. En 1996, incursionaron en la consultoría, enfocándose en gestión y calidad de procesos. La historia como consultora tecnológica de Integra está entrelazada con la decisión estratégica tomada por Carlos Pascual en 1997 de crear el primer centro proveedor de internet en Aragón, en colaboración con Telefónica y CEPYME.

La compañía apuesta por abrazar esta tecnología desde la transversalidad: cada área debe incorporar IA no solo como palanca interna de eficiencia, sino también como parte de su oferta. “Hemos creado un comando transversal para llevar la IA a todas las áreas de la compañía, con foco en gobernanza, formación, comunicación y sensibilización”, detalla su directivo.

Preguntado por el ritmo de adopción de inteligencia artificial en España, Félix Gil es seguramente de los pocos CEOS del sector en admitir la realidad: “Se hacen muchos pilotos, pero pocos escalan. Hay miedo. Miedo a equivocarse, a apostar por una tecnología que en dos meses quede obsoleta”. Empero, lo compara con el momento en que las empresas dudaban en invertir en ERP: “El coste de no hacer nada es mayor que el de equivocarte”.

Quizás por ello, quizás por la tendencia actual del mercado, confía en que los agentes inteligentes -automatismos con IA no supervisada- terminarán por romper con esas barreras iniciales. Aunque advierte, nada de ello será posible sin analizar bien los resultados de estos proyectos y favorecer el marco para que su magia se consolide.

“Lo importante es documentar, medir, explicar. La trazabilidad y la explicabilidad son ya esenciales. Pero la regulación debería venir un poco más tarde. Si no se aplica bien, puede matar procesos de innovación. Ya pasó con la ley de protección de datos”, remarca.

Lejos de ver la IA como algo reservado a las grandes empresas, Félix Gil ve en ella una gran palanca para las pymes. “Por primera vez en la historia, las pequeñas empresas pueden acceder a herramientas tan potentes como las grandes, y a precios accesibles. Lo único que necesitan es formación. Es el petróleo del siglo XXI”. Y ahí está la oportunidad de negocio que han detectado desde Integra.

Romper con el monolito

Una de las decisiones estratégicas más significativas en los últimos años, bajo la comandancia de Félix Gil, ha sido la de abandonar el monolitismo tecnológico: “Antes íbamos con un único proveedor, y nos funcionó para crecer. Pero hoy defendemos una visión agnóstica: no hay una única verdad ni una única solución”. En su opinión, cada cliente merece recibir al menos tres opciones: una que cumpla justo con las especificaciones, otra más ambiciosa y una intermedia.

No podemos ir con una sola solución como si fuera palabra de Dios. Sería una falta de humildad”, admite.

Así pues, la compañía trabaja tanto con los grandes fabricantes —Microsoft, IBM, AWS— como con herramientas de software libre. “Probamos ambas vías porque creemos en complementar sus capacidades”, detalla Gil. Esa filosofía se ha materializado, por ejemplo, en el nacimiento de Integra Catalyst, una marca interna dedicada al desarrollo de soluciones propias de IA.

Gil no esconde que esta postura ha generado tensiones con algunos socios tecnológicos, pero el CEO se muestra tranquilo: “Con los años, las conversaciones difíciles se han hecho más sencillas. Las marcas entienden que si queremos ir a proyectos más complejos y estratégicos, necesitamos libertad”.

De hecho, su portafolio va más allá de los tres nombres antes mentados. Integra mantiene una fuerte presencia en ciberseguridad, sobre todo de la mano de Fortinet, aunque también trabaja con sistemas de IBM. En el área de ERP, se han centrado en la familia de productos de Microsoft y Sage, pero no implantan SAP. Curiosamente, son uno de los principales formadores de profesionales en esta tecnología en España.

Ni vender ni ser comprados

El mercado español de la consultoría está inmerso en un profundo proceso de consolidación, con la compra de boutiques tecnológicas y de enseñas medianas por parte de grandes consultoras. Sin embargo, Integra tiene colgado el cartel de 'no se vende'.

Ni vamos a formar parte de un proceso de compra ni vamos a vender líneas concretas. Queremos seguir siendo independientes, como empresa familiar que somos, y decidir entre todos hacia dónde vamos”, asegura su CEO. Y tampoco se muestra proclive a comprar otras compañías de menor calado, porque si bien han participado en procesos exploratorios, reconoce que la integración cultural con otras compañías ha sido una barrera insalvable: “Los proyectos son personas. Sin eso, no hay nada”.

El crecimiento de Integra será, por tanto, orgánico, aunque con ambición de expandirse. Actualmente tienen sedes en Zaragoza, Madrid, Barcelona, Bilbao, Huelva y Alicante. “Seguimos buscando ubicaciones estratégicas para completar nuestra cobertura nacional. Ya hay una persona encargada del plan territorial, y lo estamos valorando en el comité de dirección”. La internacionalización, sin embargo, no está aún en la hoja de ruta, aunque sí trabajan en proyectos en más de 25 países para grandes clientes.

Con un crecimiento previsto del 17-18% para 2025, Integra sigue su hoja de ruta. Y Félix Gil, al frente, lo resume con una frase sencilla a la par que contundente: “No queremos ser los más grandes. Queremos ser los más sólidos, los más innovadores… y los más humanos”.

Aragón, polo tecnológico del sur de Europa

Además de dirigir Integra, Félix Gil está implicado en el impulso del ecosistema tecnológico aragonés a través de distintas asociaciones y patronales. “Aragón tiene fortalezas únicas: ubicación estratégica, territorio, viento y sol, talento… Ahora tiene una visión clara de convertirse en un hub del sur de Europa”, afirma.

Cita iniciativas como el DAT Alierta, el evento The Wave y la apuesta por sectores como el agroalimentario, la logística, la automoción o la energía. “Tenemos los mimbres. Ahora hay que llevarlo a cabo”.