La cadena de bloques o blockchain es un sistema en el que una lista creciente de registros se va enlazando y cifrando para proteger su seguridad y privacidad. La cadena de bloques se mantiene en varias computadoras que están vinculadas en una red de igual a igual.

El primer trabajo sobre una cadena de bloques asegurada criptográficamente fue propuesto en 1991 por Stuart Haber y W. Scott Stornetta. En una encuesta del año 2015 del Foro Económico Mundial se estima que el 10% del PIB mundial se almacenará en blockchain para el año 2027.

El impacto que tendrá la cadena de bloques en los próximos años es enorme debido a que es una tecnología que proporciona mayores estándares de transparencia y seguridad. En un estudio del año 2018 de McKinsey Digital, titulado Blockchain beyond the hype: What is the strategic business value?, se estima que la cadena de bloques se usará en gran medida para el mantenimiento de registros estáticos y dinámicos, temas relacionados con la identificación, contratos inteligentes e infraestructuras de pagos y transacciones. Por sectores, el impacto será mayor en el sector público, financiero, salud, seguros, agricultura, automoción, tecnología, energía, transporte y logística.