Porsche Experience Center, lugar de celebración del evento. FOTO: NetApp.

Porsche Experience Center, lugar de celebración del evento. FOTO: NetApp.

Tecnológicas

Un 'safety car' llamado NetApp: simplicidad, seguridad y sostenibilidad para la conquista de la nube

La compañía da un paso más en su estrategia como gestor de datos en el 'cloud' impulsando el concepto de 'data fabric' y abaratando el uso de sistemas 'flash'.

12 febrero, 2023 03:45
Hockenheim (Alemania)

Cuando uno se sube por primera vez como copiloto a un biplaza de carreras llega a la tercera vuelta haciéndose muchas preguntas. Entre ellas, cuántos giros quedan para vomitar.

Entre frenazos, acelerones, cambios de rasante y curvas peraltadas uno también se pregunta por qué una empresa como NetApp -especializada en gestión de datos enfocada a la nube- ha elegido un circuito de Fórmula 1 para su encuentro anual con sus clientes en Europa, Oriente Próximo y África (EMEA, por sus siglas en inglés).

Sólo cuando uno vuelve a poner los pies en suelo firme y recupera la estabilidad, cobra todo sentido. Y el sentido está en que actualmente vivimos una veloz y excitante carrera hacia la digitalización que otorga una importancia capital a los datos, a su almacenamiento y a su gestión. Y todo ello provoca emoción, miedo incluso.

[César Cernuda (NetApp): "Sólo utilizamos el 30% de los datos que generamos cada día"]

El frenazo de la Covid 19 no fue más que el presagio de un acelerón tecnológico de vértigo para todos; el salto que acometen muchas empresas en dirección a la nube no es más que ese cambio de rasante que asusta porque no está muy clara la dirección que hay que tomar; y las curvas peraltadas son esa especie de montaña rusa que provoca el cosquilleo típico de quien siente que su seguridad está en peligro.

El día a día de cualquier empresa es un sprint, más aún en la era digital, y obviamente necesita un piloto que no le tenga miedo a nada. Queda claro, pues, qué ha querido transmitir NetApp eligiendo este circuito, que respira tradición y que suma a sus instalaciones un espectacular y moderno centro experiencial de la marca Porsche, el lugar donde la compañía tecnológica ha celebrado el evento esta semana.

Aquí es donde la compañía ha querido intensificar su posición de liderazgo en el sector de las soluciones integrales para empresas en la nube. Gracias a su colaboración con los grandes 'gigantes' del 'cloud' público -AWS, Google Cloud, Microsoft Azure e IBM- y continuando con la metáfora automovilística, NetApp es ese sistema de estacionamiento asistido que puede permitir a cualquier compañía encontrar un buen aparcamiento en el lugar donde todo va a ocurrir (y donde de hecho ya está ocurriendo): la nube.

Reflexiona sobre ello Jordi Botifoll, vicepresidente de la compañía en Europa, Oriente Próximo, Latam y África. En una distendida conversación con D+I, reflexiona sobre los últimos anuncios de la compañía, sobre su estrategia de futuro, sobre cómo están 'estacionando' las empresas españolas en la nube e incluso sobre qué supone esta era de despidos en las compañías tecnológicas. Abróchense el cinturón.

 [José Manuel Petisco (NetApp): "El valor está en ofrecer la gestión de dato en 'flash', en la nube o en modo híbrido"]

En primer lugar, los anuncios. Estos días se ha presentado NetApp Advance, que, según la compañía, evoluciona el ciclo de vida del almacenamiento, permitiendo a las organizaciones la posibilidad de evitar ciclos de actualización complejos, costosos y lentos al permitir actualizaciones de hardware continuas y no disruptivas, y garantiza un almacenamiento eficiente, seguro y sostenible con nuevas garantías ofrecidas para satisfacer las necesidades de las organizaciones actuales.

"Cualquier CEO ya reconoce que el mundo de los datos va a ser vital para entender tendencias de mercado. Sobre estos datos podrá generar modelos de negocio y por eso hay que manejarlos con seguridad y en varios sitios, con una plataforma homogénea que te ayude a gestionar esos datos", recalca Botifoll, que hila este argumento con la necesidad de simplificar el proceso a las empresas.

El segundo anuncio, quizá el de más calado, acaba con el supuesto obstáculo económico que para muchas empresas supone emplear sistemas de almacenamiento flash, mucho más ágiles que los dispositivos magnéticos, pero tradicionalmente mucho más costosos.

NetApp ha anunciado la próxima disponibilidad de la serie C AFF, una nueva familia de opciones de almacenamiento flash que ofrece almacenamiento all-flash de menor coste, y AFF A150, un nuevo sistema de almacenamiento básico de la familia de sistemas all-flash de la serie A de AFF. 

La Senior VP de NetApp para la región EMEA, Giovanna Sangiorgi, durante la 'keynote' del evento. FOTO: NetApp.

La Senior VP de NetApp para la región EMEA, Giovanna Sangiorgi, durante la 'keynote' del evento. FOTO: NetApp.

No tiene duda Botifoll de que esta democratización paulatina del flash podría ser un punto de inflexión. "Es la tecnología del futuro. Este low cost que hemos presentado forma parte de nuestra estrategia de que tenga una expansión mayor y dará más competitividad a las empresas", reflexiona.

Ahora bien, también admite que "aunque all-flash marca el futuro, hay clientes que…" y deja un silencio que bien podría traducirse por "no lo tienen claro". Aclara, no obstante, que su uso "depende de la naturaleza de la empresa". Y concluye, autoconvencido: "All-flash es el futuro desde el punto de vista de hardware. Mucha base instalada migrará a esto".

NetApp, como ha quedado claro estos días en Hockenheim, acompaña a sus clientes hasta el extremo, poniéndoselo cada vez más fácil. Durante la Keynote principal del evento, la Senior Vice President and General Manager EMEA & LATAM de NetApp, Giovanna Sangiorgi, remarcó hasta la saciedad las cuatro palabras mágicas que marcan esa estrategia de acompañamiento: simplicidad, sostenibilidad, seguridad y ahorro.

A partir de esas cuatro palabras sucede todo y se construye la infraestructura tecnológica que NetApp edifica -como partner tecnológico- para dar cobertura a la estrategia cloud de cada empresa.

"El de los recortes es un tema delicado pero la mayoría de empresas lo hacen para adaptarse al modelo de costes que viene. La tecnología siempre triunfa".

Jordi Botifoll, vicepresidente EEMI de NetApp.

"Nosotros hemos introducido el concepto de data fabric, que es como decir que a día de hoy todas las empresas deberían empezar a pensar qué hacer, dónde guardar, cómo gestionar, cómo analizar… la ingente cantidad de datos de la que dispone", concede Botifoll.

Y esa estrategia de fábrica de datos incluye elementos que para NetApp, como ha quedado claro estos días en Alemania, son ineludibles, como la ciberseguridad -una media de 1,4 millones de dólares de coste para atajar un ataque de secuestro de datos y un gasto de más de 3.000 millones de euros en todo el mundo en seguros premium- y la sostenibilidad.

Respecto a este último punto, la compañía explica que se pueden reducir toneladas y toneladas de CO2 con el uso de las tecnologías de almacenamiento adecuadas -obviamente, las que ellos mismos proponen-. También se alertó durante alguna de las charlas sobre el consumo de energía que van a suponer los centros de datos.

Admite Jordi Botifoll que "la sostenibilidad es importante ya no sólo desde el punto de vista moral sino del cost effect".

Más allá de las tendencias globales evidenciadas durante esta jornada con 300 asistentes, nueve horas repletas de charlas técnicas y casos de uso y un espacio de networking amenizado con un cuidado y omnipresente catering, charlar unos minutos con el directivo español ofrecía la oportunidad de preguntar cómo ve NetApp a la empresa española en su salto hacia la nube.

"Las grandes empresas ya tienen un pie en la nube y el mundo de la pyme está entrando a través de los hiperescalares -recordemos, de los que NetApp es socio tecnológico-, con una pyme que está viendo más fácil su operativa gracias al modelo as a service de infraestructuras cercanas como los centros de datos o a la labor de las empresas de telecomunicaciones", explica.

Jordi Botillo, vicepresidente de NetApp, durante el evento.

Jordi Botillo, vicepresidente de NetApp, durante el evento.

Dicho de otra manera: "Soy optimista", dijo en relación a ese desembarco de las empresas españolas en el cloud y sin olvidar el "crecimiento imparable que se está produciendo en países como Brasil, Argentina, Chile y Colombia", al otro lado del charco.

A pesar de ese optimismo generalizado por parte de NetApp y de lo evidente que resulta, rodeados como estamos de coches de lujo, copas de champagne y macarons franceses, que "NetApp es hoy en día una compañía sólida con productos poderosos", en algún corrillo se escucha en varios idiomas la palabra "despidos".

"Es un tema que efectivamente flota en el ambiente, es un tema delicado, pero la mayoría de empresas lo hacen para adaptarse al modelo de costes que viene. En mis 30 años en el sector he aprendido que la tecnología siempre sale adelante, es imparable", despacha el vicepresidente.

Sobre los recortes en NetApp, impera la ley del silencio, aunque Botifoll reconoce a D+I que "en nuestro caso el porcentaje es relativamente bajo". Añade que "se han optimizado posiciones, se ha desarrollado un modelo que también nos sirve para ciertos cambios que vienen en el mercado".

"El flash es la tecnología del futuro. El 'low cost' que hemos presentado forma parte de nuestra para que tenga una expansión mayor".

Jordi Botifoll, vicepresidente EEMI de NetApp.

No obstante, no fueron ni el tema de los despidos ni la llamativa baja presencia femenina en algunas de las charlas organizadas (cuatro mujeres sobre un público de 93, por ejemplo, en una ponencia sobre ciber resiliencia) los argumentos principales en el evento.

Sí lo fue una frase repetida hasta la saciedad por varios directivos: "Los datos son para las empresas como el oxígeno para los humanos". Se explicaba a continuación por qué es tan importante el "trabajo invisible" de empresas como NetApp para organizarlos, gestionarlos, almacenarlos y protegerlos.

En definitiva, los datos, como decíamos del catering, son omnipresentes hoy en día. De hecho, antes de dejarle para que siga atendiendo sus compromisos, Jordi Botifoll saca su móvil y nos enseña un simulador de partidas de ajedrez que, gracias a la inteligencia artificial permite incluso jugar contra un robot que imita el estilo de un campeón del mundo o de tu vecino de enfrente. "Lo usan 1.000 millones de personas, que continuamente están creando patrones, movimientos… ¿Tú sabes la cantidad de datos que genera esta aplicación?", pregunta.

No sé la respuesta, pero lo que sí sé es que ver cómo un vicepresidente de NetApp juega una partida contra un ajedrecista indio no me va a producir tantos mareos como ir de copiloto en un Porsche de carreras.