Pedro J. Ramírez ha dado el pistoletazo de salida a una nueva edición de Wake Up, Spain! El presidente y director de EL ESPAÑOL ha destacado que este foro, que reúne al sector público y al privado, sirve para tomar la temperatura de la "vida pública española".

"Pero el sentido de Wake Up, Spain! va más allá de cualquier turbulencia. Este será siempre un foro de encuentro o de reencuentro, como ha venido diciendo hasta ahora Salvador Illa, incluso para quienes puedan perder temporalmente el interés por encontrarse o reencontrarse", ha añadido Ramírez.

"De igual manera que Salvador de Madariaga hablaba de esos 'españoles que se creen no serlo', no se deja de formar parte de una comunidad política, o no digamos de una sociedad con intereses y responsabilidades enlazadas, porque en un determinado momento alguien se enfurruñe y haga merienda aparte como si la concordia fuera cuestión de chiste", ha explicado el periodista.

"Ni siquiera cuando ese alejamiento de la centralidad obedece a un proyecto ideológico o estratégico diferente", ha matizado Ramírez. "Por algo decimos que nuestra Constitución no es militante: porque no impone la uniformidad a quienes la compartimos, sino que facilita la discrepancia dentro de la legalidad, incluso mediante proyectos que podamos repudiar".

Pedro J. Ramírez ha abordado estas cuestiones durante su intervención inaugural del V Foro Económico Español Wake Up, Spain!, organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y Disruptores. "Este encuentro entre las empresas y las administraciones, entre los gestores públicos y privados, este Davos español que comenzó siendo una llamada a la acción, se ha convertido en el punto de control anual del grado de cumplimiento de los proyectos en marcha y en la rampa de lanzamiento de las iniciativas innovadoras que redundarán en beneficio de todos", ha añadido.

El director de EL ESPAÑOL ha recordado unas palabras con las que el rey Felipe VI definió esta cita en su participación del año pasado: "'Lo que cuenta es lo que cada uno hace, lo que cada uno aporta y con lo que cada uno contribuye, por encima de cualquier otra consideración'. No se podía haber definido mejor el espíritu de Wake Up, Spain!".

"Cada uno tenemos un papel que cumplir en la sociedad, pero todos podemos hacerlo de forma contemplativa o proactiva", ha indicado Ramírez. Para ello ha puesto de ejemplo un cuadro de Rembrandt. Se trata de Tormenta en el Mar de Galilea, una obra de 1633, que fue robada hace décadas.

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En ella, "algunos de los apóstoles rezan serenamente para que cesen los rayos y truenos y amaine el oleaje que está a punto de hacer zozobrar la barca. Los otros trepan por los palos, se suben a las velas y tensan las jarcias. Esos son, esos sois, los que venís todos los años a Wake Up, Spain!", ha aclarado.

Ramírez ha hecho un análisis de la situación geopolítica que ahora azota el globo. "Nuestro mundo parece haberse vuelto de repente del revés. Desde la mayor democracia de la tierra, amiga y aliada, nos llegan reconvenciones, gestos hostiles y amenazas comerciales. A la vez se blanquea a una férrea dictadura que ha invadido sin justificación alguna un país europeo y pretende quedarse con parte de lo conseguido por la fuerza".

"No es de extrañar que a quienes tuvimos la suerte de asistir a la última entrega de los Premios Princesa de Asturias se nos venga una y otra vez a la cabeza la cita de Michael Ignatieff que incluyó en su discurso la Princesa Leonor. Cuidado con 'quienes utilizan la democracia para destruirla'", ha rememorado.

Con todo, ha recordado que Wake Up, Spain! "nació con la mascarilla puesta en la primavera de 2021 como respuesta a las calamidades de la pandemia. Y en su segunda edición nos tocó ya afrontar las consecuencias económicas y geoestratégicas de la invasión de Ucrania".

Pedro J. Ramírez, en un momento de su intervención en 'Wake Up, Spain!'. Sara Fernández.

"También pudimos constatar el impactante cierre de filas en apoyo de Ucrania tras la invasión rusa y el subsiguiente despliegue de ayudas al agredido y de sanciones contra el agresor".

Cambio de prioridades

"El desconcertante cambio de prioridades de la política norteamericana nos obliga ahora a acelerar esa autonomía estratégica europea que ya veníamos percibiendo como necesaria", ha destacado.

De hecho, el foro organizado por EL ESPAÑOL cuenta con la participación del ex primer ministro italiano Enrico Letta, uno de los heraldos que con más claridad nos marcaron el camino que ya resulta inexcusable abordar.

"La autonomía estratégica europea no se limita a la Defensa y la Defensa no se limita al rearme, pero ese rearme concretado en el plan Von der Leyen -digámoslo sin eufemismos ni ambigüedades-, sí, ese rearme resulta imprescindible si pretendemos proteger nuestro modelo de sociedad mediante la disuasión".

Por otro lado, Ramírez también ha recordado que la Constitución de 1978 se va a convertir en la más longeva de la historia de España. "Quienes tuvimos la suerte de vivir desde la política o el periodismo aquel proceso constituyente sabemos hasta qué punto el consenso se convirtió en la clave de bóveda de nuestro modelo de convivencia".

Un rugido en defensa de la independencia judicial

"Hay una serie de procesos en los que la formación de mayorías cualificadas no es una opción sino una obligación. Y hay una serie de ámbitos, desde las infraestructuras a la política exterior y, por supuesto, la Defensa, en los que el interés público exige pactos que abarquen varias legislaturas e impliquen a gobiernos diferentes", ha matizado.

Por ello, ha recordado las palabras de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en una de sus intervenciones en Wake Up, Spain! "'¿Qué más tiene que ocurrir para que seamos capaces de orillar rencillas y diferencias menores para unir fuerzas?'. Hoy hago mía su pregunta. Eso, ¿qué más tiene que ocurrir?".

Dos cuadros de Rembrandt, tras dos citas de Sánchez

"El nuestro es un sistema indisociablemente parlamentario y por lo tanto es en el Congreso y el Senado donde deben fraguarse las correspondientes mayorías, empezando por los preceptivos e inexcusables Presupuestos Generales del Estado que, como bien ha dicho el señor Feijóo, deberían servir de pista de aterrizaje de esos grandes acuerdos", ha reclamado el presidente de EL ESPAÑOL.

"La Historia nos demuestra que esas derivas que a veces tanto nos inquietan pueden ser muy bien viajes de ida y vuelta". Como ejemplo de este fenómeno ha puesto otro cuadro de Rembrandt.

Facturas y democracia

Se trata de El regreso del hijo pródigo (1661-1669). "No hace falta tener convicciones religiosas para entender su significado profundo. El hijo menor que ha dilapidado o invertido mal en un desaforado viaje hacia no se sabe dónde la parte de la fortuna que le había sido confiada, es acogido con júbilo cuando regresa a la casa de su padre".

"El reproche está implícito en la mirada del hijo mayor y los demás presentes. Pero las manos del padre sobre la espalda del descarriado que retorna reflejan lo esencial: 'Estaba perdido y ha sido encontrado'".

"En una democracia las facturas se pasan en las urnas y de los delitos se responde ante los tribunales. Pero lo sustancial del concepto de Nación es su carácter integrador y esto es aplicable a los dirigentes, a los partidos políticos o a los sectores sociales con mayor identidad diferenciada", ha postulado.

"Nuestra morada vital, nuestra democracia constitucional estará incompleta si quienes emprenden un excéntrico periplo con extrañas compañías no llegan un día de vuelta", ha avisado Pedro J. Ramírez.

Amputación

"Toda ausencia es una amputación. Sobre todo, cuando se alardea de tantos años de vivencias compartidas. Esa ausencia, esta ausencia, es una amputación, una merma, una mengua para quienes se alejan errabundos, pero también para quienes nos quedamos sin su concurso", ha alertado.

"La pertenencia a un mismo tronco no pone condiciones ni exige contrapartidas. La convivencia en libertad es nuestro sueño eterno. La centralidad democrática también. Bastará volver a desperezarnos junto a quienes parece que, después de una mala noche, esta vez se les han pegado las sábanas, para que la plenitud se sienta de nuevo en Wake Up, Spain!".