El secretario de Organización de Podemos, Alberto Rodríguez, ha anunciado este jueves que no se presentará a las primarias de su partido para formar parte de la nueva dirección de la formación morada que saldrá del próximo Vistalegre IV, decisión que ha desvinculado del proceso judicial contra él por haber agredido supuestamente a un policía.

La Fiscalía del Tribunal Supremo ha pedido una pena de seis meses de prisión para el ex dirigente de Podemos por presuntos delitos de atentado a la autoridad y lesiones leves a un policía que habría cometido durante una manifestación celebrada el 25 de enero de 2014 en el centro de La Laguna (Tenerife) contra la ley Wert.

La Fiscalía también pide para Rodríguez una pena de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo (ser elegido para ocupar un cargo electivo público) durante seis meses. De ser impuesta, el responsable de Organización de Unidas Podemos tendría que dejar su escaño en el Congreso de los Diputados.

"Cerrar una etapa"

"Creo que toca cerrar una etapa, por ello renuncio a presentarme a las primarias para formar parte de la dirección del partido", ha afirmado en un vídeo que ha difundido a través de las redes sociales.



Ha subrayado que su renuncia "nada tiene que ver con la injusta persecución policial y judicial" que sufre, y proclama que aunque le puedan "juzgar mil veces" y "condenar sin pruebas un millón de veces" ello no le hará "modificar ni un centímetro" su camino para "conquistar derechos y libertades para lograr una mayoría social".



Alberto Rodríguez defiende la labor que ha llevado a cabo durante los dos años en que ha permanecido como secretario de Organización de Podemos y se felicita porque su formación haya dejado en el "baúl" de "los malos recuerdos" las "broncas internas retransmitidas en prime time", así como "el desangre de la organización y la forma de concebir la política interna como un trampolín personal".



También señala al justificar su renuncia que todos "tenemos que dar un paso" para evitar que unos pocos "tengan que darlo todo", como siempre ocurre, porque los "procesos históricos son imparables", sostiene.



En todo caso, él asegura que ve su decisión como un "proceso natural" y "sin dramas" y recuerda que siempre fue consciente de que antes o después "llegaría el momento de dar el paso a un lado", algo por otra parte considera "saludable, justo y natural en cualquier colectivo humano" que quiera avanzar.

Vistalegre IV

Podemos se encamina a su cuarto congreso nacional, conocido como Vistalegre IV, que se celebrará el próximo 13 de junio. Allí será encumbrada Ione Belarra como secretaria general. Rodríguez despeja así del camino de la ahora ministra de  Derechos Sociales y Agenda 2030 para que conforme su propio equipo.

La salida de Pablo Iglesias tras los malos resultados de las elecciones madrileñas ha desencadenado que su Podemos empiece a desintegrarse. Belarra tiene como objetivo armar una nueva dirección que reflote a la formación.

La navarra es la única dentro de los líderes que presentará su candidatura en junio y, por tanto, la más que segura ganadora del congreso extraordinario, que se celebrará en semanas, "lo antes que permitan los estatutos", según explicaron fuentes internas a EL ESPAÑOL.

Irene Montero renunció a postularse en la carrera hacia la secretaría general para centrarse en su puesto de ministra de Igualdad. El objetivo es que el partido inaugure de verdad una nueva etapa, lejos del "tapón" que dijo Iglesias que él mismo representaba para la formación política.

La Ejecutiva del partido pretende acelerar todos los plazos para que la situación de interinidad dure lo menos posible, toda vez que "nunca se ha planteado que Yolanda Díaz se afilie al partido y asuma su liderazgo", confirman fuentes internas. La vicepresidenta tercera quedará como la cabeza visible de los morados en el Gobierno y como la candidata oficialista para las primarias que se convoquen en el momento oportuno, antes de las próximas elecciones generales.

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