La irrupción de VOX en el Parlamento andaluz, donde tendrá una representación de 12 escaños, sigue sacudiendo el panorama político nacional. Al margen de las maniobras y las estrategias de los partidos para la formación de un nuevo Gobierno en la Junta de Andalucía, preocupa el controvertido programa electoral con el que los de Santiago Abascal han concurrido a las elecciones andaluzas. 

Más de 10.000 usuarios de la plataforma de peticiones Change.org se han unido a una campaña de firmas que promueve ilegalizar VOX por defender "Ideas antidemocráticas, anticonstitucionales y contrarias a la normativa legal vigente". Para argumentar esta petición, la iniciativa alude a Ley Orgánica 6/2002 de Partidos Políticos. 

“Un partido será declarado ilegal cuando su actividad vulnere los principios democráticos”, reza el texto legal destacado en la iniciativa ciudadana para ilegalizar VOX dirigida al Gobierno. 

El propio Ejecutivo de Pedro Sánchez ha expresado en varias ocasiones su "preocupación" por las propuestas políticas y los argumentarios de los líderes de VOX. "A este Gobierno, y a la inmensa mayoría de hombres y mujeres, nos preocupa mucho un partido cuyo ideario es anticonstitucional", advirtió el pasado viernes la vicepresidenta del Gobierno. "Casi todo lo que vemos que dice es inconstitucional", apostilló Carmen Calvo en la rueda de prensa tras el último Consejo de Ministros. 

En la misma línea, este mismo lunes la titular de Justicia, Dolores Delgado, ha subrayado que VOX es "anticonstitucionalista" al contrario que los partidos que apoyaron la moción de cesura que destituyó a Mariano Rajoy, que "aceptan" la Constitución".