Santiago de Compostela

La familia Franco insiste en pedir retirar los bienes del interior del Pazo de Meirás cuando tan solo falta un día para la entrega provisional del inmueble al Estado, prevista para el jueves 10 de diciembre a las 11.00 horas.

Así se lo ha solicitado al Juzgado de Primera Instancia número uno de La Coruña, aduciendo que tendrían que poder retirar "todos los bienes" porque "ninguno de tales bienes muebles aporta absolutamente nada a la significación del inmueble reivindicado como Bien de Interés Cultural (BIC)".

En un escrito remitido al juzgado, la familia Franco ha avanzado que recurrirá el auto del pasado viernes en el que se declaraba al Estado depositario de los bienes del Pazo de Meirás en espera de la publicación de una sentencia definitiva y tan solo se permitía retirar bienes de "estricto uso personal" o los que no comprometan los futuros usos del inmueble.

"Retirar estos bienes no supondría comprometer los usos definitivos del inmueble", han apuntado en su escrito los herederos del dictador, quienes recuerdan que en las sucesivas resoluciones judiciales sobre el Pazo de Meirás "no consta nada en cuanto a cuáles habrán de ser sus usos".

En todo caso, y en previsión de que "es evidente que será rechazada" su petición de retirar todos los bienes, los Franco piden que se indique "cuáles de los bienes" pueden ser retirados en los próximos días, "concediendo a esta parte autorización para su retirada y traslado y precisando los términos en los que podrá o habrá de proceder".

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha convocado este miércoles a la Xunta de Galicia, la Diputación de La Coruña y el Ayuntamiento de Sada a una reunión para abordar la situación del Pazo de Meirás, un encuentro al que ha anunciado que acudirá el presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo.

Usos futuros

Tras la entrega provisional prevista para este jueves y la espera pendiente para una sentencia definitiva, queda por abordar otra cuestión fundamental: el uso definitivo del Pazo de Meirás.

Desde la Xunta de Galicia, el consejero de Cultura, Román Rodríguez, ha anunciado que se está trabajando en un plan de usos, en previsión de que el Gobierno del Estado le ceda la gestión del pazo al Ejecutivo gallego. 

Las intenciones del Gobierno autonómico pasan por darle utilidad al Pazo de Meirás como "un lugar de creación literaria y cultural", ya que era el uso que le quería dar la familia Pardo Bazán antes de que el inmueble fuese "deturpado por el franquismo", y así convertirlo en "un faro de igualdad" que sirva para "reivindicar el papel y la fuerza creativa de la mujer".

Desde BNG y PSdeG la apuesta pasa por utilizar el inmueble para "recuperar la memoria democrática".

Los nacionalistas abogan por "una gestión consorciada" entre la Xunta, la Diputación y el Ayuntamiento de Sada y porque la sociedad civil gallega, "quien abrió este debate y dio una batalla civil muy importante", sea "la verdadera protagonista" de la entrega de las llaves del pazo.

Por su parte, el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, se ha mostrado abierto a estudiar "fórmulas de gestión y una posible transferencia" del Pazo de Meirás, aunque entiende que el Gobierno central es la garantía de "la defensa de la memoria histórica" y de la Xunta de Galicia "se fía lo justo".