Un grupo disidente norcoreano estaría detrás del asalto a la embajada que el país asiático tiene en Madrid. En concreto, apuntan a la organización Defensa Civil Cheollima, cuyo objetivo sería desestabilizar al régimen de Pyongyang. Y sus miembros habrían actuado con sus propias capacidades, sin el apoyo de terceros países, como apuntaban algunas hipótesis de los investigadores.

El periódico estadounidense The Washington Post señala al grupo disidente como autor del asalto a la embajada norcoreana en Madrid. El nombre del grupo disidente se hizo conocido en verano de 2017 al evacuar a un sobrino de Kim Jong Un, crítico con el régimen de Pyongyang, de la isla de Macao, donde se especulaba que su vida podía correr peligro.

Como adelantó EL ESPAÑOL, una de las principales pesquisas con las que trabajaban los investigadores -las pesquisas sobre el asalto recayeron en Policía Nacional y CNI- apuntaba a que podía tratarse de un movimiento perpetrado por norcoreanos. De este modo se descartaría la participación de terceros países. En los últimos días se habían publicado informaciones que apuntaban a la CIA estadounidense como autora o colaboradora del asalto.

El secuestro durante horas del personal de la embajada y el robo de material informático se produjo en vísperas de la cumbre entre Donald Trump y Kim Jong Un en Vietnam. Recordemos que el ex embajador norcoreano en Madrid, Kim Hyok Chol, fue uno de los principales artífices de que fructificase la reunión; un hito diplomático que a la postre fue un fracaso bilateral.

Las tensiones diplomáticas

Desde entonces, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha andado con pies de plomo. El departamento ahora dirigido por Josep Borrell entiende que es un asunto extremadamente delicado y que cualquier tipo de posicionamiento o paso en falso podría desencadenar una crisis diplomática considerable.

Según ha sabido este diario, las informaciones que apuntaban a la CIA propiciaron un diálogo informal entre Madrid y Washington. La aproximación fue amistosa, en los mismos buenos términos en los que se desarrollan las relaciones bilaterales. Sin embargo, se dejó entrever cierto malestar por las insinuaciones de que los servicios secretos estadounidenses pudieran haber colaborado en el asalto de la legación.

Con todo, la preocupación se ha asentado en Exteriores, habida cuenta de que se ha producido un asalto con rehenes a una legación en Madrid.

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