Golpe judicial al mayor banco del mundo, el Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), por su implicación en presuntos delitos de blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública. A primera hora de la mañana, la Guardia Civil, junto a la Fiscalía Anticorrupción, irrumpió en la sede de la entidad bancaria en Madrid para llevar a cabo un registro de sus oficinas y proceder a la incautación de documentación. La operación se ha saldado con al menos cinco detenidos, entre ellos el directos y el subdirector, aunque la investigación está centrada en la propia entidad.

Registran la sede del banco chino ICBC en Madrid investigando blanqueo de capitales

Según ha podido saber EL ESPAÑOL de fuentes de la investigación, este registro ha sido ordenado por el Juzgado de instrucción número 7 de Parla (Madrid) después de encontrar indicios de que el ICBC habría estado ayudando a ciudadanos chinos con negocios en España a sacar el dinero procedente de las ventas hacia China y evitar así declarar a Hacienda sus beneficios.

La sede que hay de la entidad en España se trata de una sucursal del ICBC Luxemburgo, y que ahora se encuentra clausurada mientras los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil extraen la información necesaria de sus ordenadores.

Por capitalización bursátil, el ICBC es considerado el banco más grande del mundo con un valor de 284 mil millones de euros, en fecha de 2015, superando al banco estadounidense Well Fargo.

Un “agujero negro”

Los investigadores califican la sede en España como un auténtico “agujero negro” utilizado por ciudadanos chinos para mandar su dinero de vuelta a China. Según sus sospechas, esta sede se abrió en Madrid con el único objetivo de blanquear el dinero de sus compatriotas.

Los empresarios chinos meten en España gran cantidad de productos a través de diversas aduanas declararon muy por debajo de lo que realmente introducen. El siguiente paso de la pirámide son ciudadanos chinos que en sus tiendas venden estos productos. El beneficio real obtenido, muy superior al declarado, se ingresa en el ICBC para que el dinero ganado vuelva a China y allí sea invertido.

De esta manera, ciudadanos chinos residentes en España estarían evitando pagar a la Hacienda española lo que debería. Al declarar la entrada de productos muy por debajo a lo que meten en realidad, lo que se declarar es únicamente la parte correspondiente. Todos los demás ingresos en efectivo recaudados se sacarían de España a través del ICBC.

Agentes en la sede del ICBC en el Paseo de Recoletos, 12 (Madrid) Samuel De Román

Así lo sospecha tanto la Fiscalía Anticorrupción, como la Guardia Civil y el juez encargado del caso, razón por la que se ha ordenado esta entrada y registro. Por ahora está por ver si algún alto cargo de la entidad podría ser responsable penalmente de estos hechos. Por ahora, la acusación va dirigida al propio banco como persona jurídica.

Una de las organizaciones criminales que habrían blanqueado sus activos a través de esta entidad sería la desarticulada por esta misma unidad del Instituto Armado en el marco de la 'operación Snake', desarrollada en mayo de 2015 bajo la dirección del mismo juzgado y de la Fiscalía Anticorrupción, con un montante, conocido hasta el momento, de 40 millones de euros.

Europa, pendiente

En esta operación ha participado la Oficina Europea de Policía (Europol), cuya función es velar por el cumplimiento de la ley en la Unión Europea y ayudar a las autoridades policiales y judiciales nacionales a combatir la delincuencia internacional. Estas autoridades europeas han puesto el ojo en esta operación al sospechar que la mecánica del ICBC podría estar institucionalizada en otros países. Además, tiene en cuenta que la sede que hay en España de la entidad, concretamente en Madrid, se trata de una mera sucursal del ICBC Luxemburgo y, por tanto, su matriz podría estar al tanto de lo ocurrido en la capital española.