La explotación y tráfico de seres humanos, especialmente de las mujeres y la infancia, es una realidad. En España, según los datos del Balance Estadístico sobre trata y explotación sexual del Ministerio de Interior, en el periodo comprendido entre 2018 y 2022, se han registrado 2.240 víctimas. Del total, 2.140 era mujeres, 24 niñas y adolescentes y 3 niños y adolescentes. 

Esta problemática se ceba especialmente con las mujeres y niñas de países extranjeros. En este sentido, acorde al Ministerio de Interior, entre las nacionalidades que han sufrido explotación sexual en España están: Colombia (454), Rumanía (292), República Dominicana (235), China (193), Brasil (190) y Venezuela (121). El restante se corresponde a mujeres españolas con un total de 364 casos.

Se trata de una amenaza global motivada por complejas y numerosas causantes. La desigualdad, la pobreza, la cultura machista, el estigma o la invisibilización de los problemas, son solo algunas de ellas. Se trata de mujeres, niñas y niños en una situación de extrema vulnerabilidad, que se ve condicionada a su vez por cuestiones tales como la edad, el sexo, la etnia, la raza, la identidad sexual o la religión. 

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Con el objetivo de visibilizar esta situación, cada 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional Contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños. Ante esto, son muchas las organizaciones, instituciones o entidades que ponen en marcha importantes campañas para sensibilizar a la opinión pública sobre esta realidad. 

Ponte en su piel

Entre ellas se encuentra la producida por la Fundación Márgenes y Vínculos bajo el título Ponte en su piel, dirigida especialmente a un público joven con el objetivo de prevenir la violencia sexual dirigida a jóvenes. Aunque si bien es cierto que la mayor parte de las víctimas son mujeres, esta campaña, que consta de tres spots realizados en colaboración con la directora Mabel Lozano, está protagonizada por hombres.

Esto se debe a que la misma se encuentra inspirada en un hecho real ocurrido en el año 2020 en la localidad de la Sierra de Cádiz, donde varios jóvenes fueron obligados a prostituirse. Una vez fueron liberados, recibieron el estatus de víctimas de trata de seres humanos con fines de explotación sexual.

Ni una víctima más

La Asociación española para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP) presenta su nueva campaña Ellas son las protagonistas. Por ellas y por todas por el Día Internacional Contra la Explotación Sexual y el Tráfico de mujeres, niñas y niños. El objetivo, según esta organización, es visibilizar el papel que desempeñan las mujeres supervivientes en la lucha contra la explotación sexual y el tráfico de personas.

A lo largo del 2022, las unidades móviles de APRAMP brindaron información y asesoramiento a 14.500 personas, de las cuales se atendieron 1.868 nuevos casos. De estos, 125 personas fueron demandantes de protección para víctimas de trata. Además, se llevaron a cabo intervenciones directas en 870 lugares y se identificaron 301 nuevos espacios específicos.

Un total de 1.292 personas se inscribieron los centros de acogida de la Asociación e iniciaron un itinerario de inserción, mientras que 3.275 personas recibieron información y orientación. Dentro de las distintas áreas de asistencia y apoyo, 439 personas recibieron atención psicológica, 1.085 recibieron asistencia jurídica y 930 en el área de orientación e información sanitaria.

Para la Asociación, la historia de las mujeres víctimas de explotación sexual y tráfico de personas finaliza cuando se alejan de las garras de los abusos perpetrados por las mafias y es entonces cuando "se convierten en protagonistas de sus propias vidas realizando un trabajo esencial al contribuir en la detección de nuevas víctimas", según afirman desde APRAMP. 

Para que esto se materialice es esencial "crear y ofrecer alternativas reales que satisfagan sus necesidades, alentando en el desarrollo de habilidades sociales y proporcionando herramientas de formación y adquisición de conocimientos para facilitar la inserción laboral de acuerdo con sus intereses", reza el comunicado. 

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Escuela de Supervivientes

Creada en 1994 y con una participación media de 12 mujeres al año, alcanzando una participación de 360 mujeres en tres décadas, la Escuela se ha convertido en un espacio con el objetivo principal de formar y capacitar profesionalmente a sus integrantes a través de la formación teórica y práctica, así como un observatorio constante de la situación de la trata y explotación.

“Es un punto de apoyo a las víctimas, así como una red de cercanía que permite dar respuesta inmediata ante las situaciones de emergencia a través de profesionales especializados en materia de mediación, trata y explotación”, añaden. "Sin ellas, las protagonistas, este camino no sería posible. Por ellas y por todas, seguimos luchando contra la explotación sexual y la trata", concluyen.