Los últimos datos publicados en 2021 en el informe Covid-19 y el fin de la violencia contra las mujeres y niñas de ONU Mujeres, indican que 243 millones de mujeres  de entre 15 y 29 años han sufrido violencia sexual o física por parte de sus parejas sentimentales en el último año a nivel global.

Asimismo, el estudio expone que solamente el 40% de las mujeres que sufren violencia denuncian. La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, aclara: "Incluso antes de que existiera la covid-19, la violencia doméstica ya era una de las violaciones de los derechos humanos más flagrantes".

En España, según los últimos datos de la Delegación de Gobierno contra la violencia de género, el número total de mujeres asesinadas por violencia de género desde el año 2003 hasta el día de hoy es de 1.118.

"La violencia contra las mujeres es una crisis mundial", explica Sima Bahous

16 días de activismo

Con el objetivo de que las cifras no se queden sólo en estadísticas, el secretario general de Naciones Unidas, Antònio Guterrez, ha lanzado la campaña ÚNETE de aquí al 2030 para poner fin a la violencia contra las mujeres. Este año, destinada a "pintar el mundo de naranja" para poner fin a esta lacra de una vez por todas.

Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres, cuenta desde la plataforma de la campaña, que, en este caso, se necesita la cooperación entre gobiernos, instituciones y personas de todo el mundo "no sólo durante los 16 días de activismo, sino todos los días". Porque, como asegura, "la violencia contra las mujeres es una crisis mundial".

Según datos de ONU Mujeres, la pandemia ha acrecentado los factores de riesgo contra la violencia de mujeres y niñas

La campaña contará con 16 días de activismo, desde el 25 de noviembre hasta el 10 de diciembre, y tratará de movilizar a la sociedad civil y organizaciones por los derechos de la mujer, así como universidades y sector privado, entre otros.

El propósito de esta iniciativa es sensibilizar y formar al público sobre el trabajo realizado por diferentes organizaciones para erradicar la violencia contra las mujeres y niñas.

Además, como la propia campaña indica con su eslogan, "pinta el mundo de naranja", se anima a que las personas vistan con algo de ese color y se pinte con él espacios físicos y virtuales durante los días de activismo. También, se ha puesto en marcha un crowfunding, #Give25forUNTF25, para apoyar el desarrollo de medidas mundiales para concienciar sobre esta problemática.

Covid-19 y violencia de género

La pandemia ha acrecentado los factores de riesgo contra la violencia hacia las mujeres y las niñas, según datos de ONU Mujeres. El informe elaborado por esta entidad indica que, desde el comienzo de la pandemia, se ha intensificado la violencia, y, sobre todo, la que sucede dentro del hogar.

Mlambo-Ngcuka es tajante en esta cuestión y explica que los efectos de la covid-19 en las mujeres de todo el mundo son "muy duros". Millones de ellas son "víctimas de violencia en el ámbito privado", están "confinadas con sus agresores", son "cuidadoras no remuneradas, o trabajadoras en puestos sin protección social".

Europa está a la cabeza en la adopción de medidas contra la violencia de mujeres y el trabajo no remunerado

Asimismo, el Rastreador Global de Respuestas de Género a la covid-19, creado por ONU Mujeres y coordinado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), indica que la mayoría de los países del mundo no están haciendo lo suficiente para proteger a mujeres y niñas de las consecuencias económicas y sociales que ha dejado la pandemia. 

Se han analizado medidas en tres categorías: las que combaten la violencia, las que dan apoyo a mujeres que realizan cuidados no remunerados y las que refuerzan la economía. Sin embargo, un 20% de los Estados analizados no han adoptado ninguna medida con perspectiva de género en este sentido.

El rastreador muestra que Europa está a la cabeza de la respuesta a la violencia contra mujeres y niñas, pues en este ámbito el 60% de las medidas adoptadas pertenecen a este continente. Pero también realiza un gran apoyo a la respuesta contra el trabajo no remunerado: ha adoptado un 72% del total de las medidas aplicadas. 

Los peores datos se dan en aquellos países en conflicto. En estos casos, la acción de la comunidad internacional a través de estrategias y políticas es determinante, porque como explica Bahous: "Las violaciones de derechos humanos están exacerbando la violencia contra las mujeres".