Castilla-La Mancha ofrece el escenario perfecto para que los amantes del mundo del vino puedan vivir las mejores experiencias enogastronómicas. Hoy, sus bodegas ofrecen a los visitantes experiencias únicas a lo largo de seis rutas certificadas como Rutas del Vino de España que atraviesan las tierras de Don Quijote.
Descubrir esta región a través de estos recorridos vitivinícolas es viajar disfrutando de la naturaleza, del patrimonio y de la gastronomía. Y se puede hacer en pareja, con amigos o con la familia, y en cualquier época del año.
Esta comunidad autónoma es el mayor viñedo del mundo y eso se traduce en una producción y una calidad excepcionales. Pero el vino no son solo cifras, sino una experiencia que va desde la vendimia hasta el descorchado de una botella.
Te ofrecemos un recorrido por seis rutas donde es posible vivir en primera persona el proceso de elaboración, conocer de dónde viene cada referencia y apreciar el sabor de unos vinos con personalidad, carácter y grandes historias que contar.
Ruta del Vino de La Mancha
Cata de vino en viñedo, Finca El Refugio (Ciudad Real).
Los diez pueblos que integran este "mar de viñas" son El Toboso (Toledo), Villarrobledo (Albacete), Socuéllamos, Alcázar de San Juan, Tomelloso, Campo de Criptana, Villarrubia de los Ojos, Argamasilla de Alba, La Solana y Pedro Muñoz (Ciudad Real), junto con dos bodegas de la provincia de Cuenca.
Todos estos municipios son de antigua raigambre vitivinícola y preservan casonas de labranza, bodegas, cuevas, chimeneas y bombos. Geniales joyas de arquitectura popular rural que no solo embellecen y decoran las tierras de esta comarca natural, sino que la dotan de sus señas de identidad únicas y singulares.
Aquí podrás disfrutar in situ del mundo de vino con sus variedades autóctonas mientras visitas sus bodegas y disfrutas de una cata comentada. Además, también podrás degustar una comida campera entre viñedos, una ruta de tapas saboreando la cocina del Quijote, una visita a los molinos de viento para descubrir su funcionamiento o un atardecer con una copa de vino en la mano.
Ruta del Vino de La Manchuela
Viñedos.
Esta ruta está conformada por pueblos de las provincias de Albacete y Cuenca. Albaceteños son Abengibre, Alatoz, Alborea, Alcalá del Júcar, Balsa de Ves, Carcelén, Casas de Ves, Casas Ibáñez, Cenizate, Fuentealbilla, Jorquera, Mahora, Motilleja, Navas de Jorquera, Pozo Lorente, Valdeganga, Villa de Ves, Villamalea, Villatoya y Casas de Juan Núñez; y conquenses son Alarcón, El Herrumblar, Iniesta, Villanueva de la Jara, Motilla del Palancar, Granja de Iniesta, Enguídanos, El Peral y Quintanar del Rey.
La bobal es la variedad autóctona y estrella de esta tierra, que tiene como resultado unos excelentes vinos tintos de esta comarca natural a caballo entre dos provincias limítrofes con el Levante español. Bañadas por las hoces de los ríos Júcar y Cabriel, dibujan unos paisajes abruptos e inolvidables en contraste con las llanuras y las vegas dedicadas al cultivo.
Aquí, además de la visita a las bodegas y viñedos, podrás disfrutar de una jornada en el campo y un paseo en carruaje de caballos entre viñedos, podrás recorrer la hoz del río Júcar en trenecito turístico en Alcalá del Júcar, descubrir el curioso proceso de cultivo del champiñón y darte un relajante baño o circuito de aguas en los hoteles o casas rurales de la zona.
Ruta del Vino de Valdepeñas
Bodega museo.
Los municipios que la integran son Moral de Calatrava, San Carlos del Valle, Santa Cruz de Mudela, Torrenueva, y el que da nombre a la ruta: Valdepeñas.
Las variedades airén y cencibel son las protagonistas del cultivo vitivinícola de esta zona del sur de la provincia de Ciudad Real, cultivo que hunde sus raíces en tiempos ya prerromanos, como lo atestiguan los hallazgos arqueológicos del yacimiento Cerro de las Cabezas. De esta forma, hablar de Valdepeñas es hablar de vinos y de cultura del vino, ambos indisociables.
En cuanto a las experiencias, te podrás adentrar en las entrañas de la tierra y descubrir las bodegas subterráneas que inundaban el casco urbano de Valdepeñas, saborear los vinos en las propias bodegas que los producen, descubrir el proceso de elaboración del aceite de oliva virgen extra que también se produce en esta zona y disfrutar de una jornada de golf en combinación perfecta con una sesión spa y un merecido homenaje gastronómico.
Ruta del Vino de Almansa
Recreación de la batalla de Almansa.
Los cuatro municipios que forman parte de esta ruta del vino son Almansa, Alpera, Higueruela y Hoya-Gonzalo, todos ellos situados en la provincia de Albacete.
Verdejo y garnacha tintorera son algunas de las variedades que se cultivan en esta zona que bien pudiéramos llamar "frontera de sabores", en la que el patrimonio histórico monumental cobra importante protagonismo al haber sido durante siglos, tierra fronteriza con los reinos de Levante. Muestra de ello es el imponente castillo de Almansa, el palacio de los Condes de Cirat y el Museo de la Batalla de Almansa.
Para los amantes de la naturaleza, cerca de Higueruela, el complejo lagunar de Pétrola ofrece la oportunidad de disfrutar de la observación de aves, pues atrae multitud de diversas especies. Los visitantes podrán alojarse en las casas rurales de la ruta, relajarse con un tratamiento spa que algunos de ellos ofrecen y saborear la gastronomía de la zona, donde los tradicionales gazpachos manchegos, el arroz con pollo y los caracoles son sus estrellas.
Ruta del Vino de Jumilla
Tamborada de Hellín y Tobarra (Albacete).
En el sur de la provincia de Albacete, limítrofe y fundiéndose con la vecina Murcia, la Ruta del Vino de Jumilla está integrada por los municipios de Fuente-Álamo, Hellín, Montealegre del Castillo, Ontur, Tobarra, Albatana y Jumilla. Este último da nombre a la ruta y se sitúa geográficamente ya en tierra murcianas.
Con unos vinos distintos, la variedad de vino monastrell dota al destino de una personalidad y singularidad propia. Aquí puedes disfrutar del mundo del vino en profundidad y en modo 360º, pues por doquier encuentras bodegas, enotecas, bares de vinos, museos y comercios especializados en el vino y en la cultura que lo rodea.
El ciclo MEV (Música Entre Vinos) aúna música, rica gastronomía y buenos vinos en las noches de primavera y verano; las Semanas Santas de Jumilla y de Hellín están declaradas de Interés Turístico Internacional; y las Tamboradas de Hellín, Tobarra y Agramón están declaradas por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Ruta del Vino de Méntrida-Toledo
Cuevas de Castillejo, Méntrida (Toledo).
Once municipios de la provincia de Toledo participan en este recorrido: Méntrida, Torrijos, Camarena, La Torre de Esteban Hambrán, Escalona, Maqueda, Montearagón, Fuensalida, Carmena, Quismondo y Nombela.
Variedades múltiples de vinos tanto autóctonas como foráneas son las protagonistas del cultivo del vino en esta ruta: garnacha y sirah, albillo y chardonnay… Los vinos aquí son a cada cual más distinto, a cada cual más personal, pero todos ellos espectaculares.
En esta ruta encuentras el maridaje perfecto entre vino y cultura, puesto que los lugares que recorre están asociados estrechamente a tierras de antiguos señoríos y realengos, de los cuales hoy en día se conservan huellas que nos permiten viajar en el tiempo hasta entonces, como nos lo permiten las jornadas Crónicas del Rey don Pedro, que cada mes de marzo reviven aquellos tiempos de esplendor medieval.
Más información en https://rutasvino.castillalamancha.es/