Un plato tradicional, pero con la libertad creativa del chef Rubén Sánchez, del restaurante 'Epílogo' de Tomelloso (Ciudad Real), ha sido el ganador del Concurso Nacional de Escabeches celebrado en Madrid Fusión.

El castellano-manchego se ha impuesto a otros seis finalistas en una competición muy reñida y que ha tenido a los jueces deliberando un largo tiempo. El plato premiado se trata de un escabeche de mandarina con cecina y níscalo encurtido.

"Partimos de un escabeche tradicional, pero, en paralelo, hacemos otro de mandarina y los fusionamos, añadiendo el vinagre del encurtido de níscalo. Además, tiene un praliné de castañas asadas debajo", ha detallado el chef.

Asimismo, el propio Rubén Sánchez ha reconocido que la tradición de la cocina viene de su madre. "Nos gusta dar un poquito de rock and roll. Yo vengo de una tradición de vinagre".

División de opiniones

En el jurado estaba el chef de Cañitas Mayte, Javier Sanz, ganador en varios concursos del evento culinario, que ha reconocido que le ha "encantado". "El níscalo tiene una personalidad que perdura y es un plato de alta cocina que podría estar en cualquier menú de degustación", ha afirmado.

Sin embargo, en el jurado ha habido división de opiniones, ya que algunos no lo consideraban un escabeche al no tener "la potencia natural del vinagre".

Pese a ello, el sabor y el recuerdo se han impuesto y ha resultado el ganador. Un veredicto que ha dado el presidente del jurado, David Giménez: "Hay tradición y vanguardia. Esto es un ejemplo de un escabeche diferente, con matices. Lo bonito es que haya varias versiones. Un platazo con la seta escabechada y el toque de castaña", ha sentenciado.