El restaurante Ancestral, ubicado en Illescas (Toledo) y comandado por el chef Víctor Infantes, cerrará sus puertas el próximo domingo 30 de marzo y se trasladará a Pozuelo de Alarcón (Madrid), la localidad con la renta media per cápita más alta del país.
Una mudanza que supondrá al establecimiento la pérdida de la estrella Michelin que consiguió en 2022, apenas 10 meses después de su inauguración. Además, hace un año obtuvo su primer Sol Repsol.
Su propuesta se basa en la recuperación de técnicas ancestrales, con el fuego como eje central y el uso de brasas y pucheros de barro como elementos clave.
Una decisión "estratégica"
Infantes ha explicado a Europa Press que el traslado de Ancestral se trata de una decisión "totalmente estratégica", dado que la mayoría de sus clientes actuales provienen de Madrid.
"Al movernos a Pozuelo, nos acercaremos más a nuestro cliente y llenaremos los huecos entre semana que tanto cuesta llenar en Illescas", ha añadido.
Infantes, sin embargo, ha recordado que su cocina no se marchará por completo de Illescas, ya que seguirá operando con dos establecimientos en la localidad: Obrador Ancestral, dedicado al catering, y Brasacoa, su propuesta de hamburguesas a la brasa.
Con el cierre de Ancestral en Illescas, Castilla-La Mancha perderá una de las 14 estrellas Michelin que actualmente ostenta y la localidad toledana se quedará únicamente con una, la que mantiene el televisivo Pepe Rodríguez (Masterchef, TVE) en El Bohío.
No obstante, Infantes confía en mantener su esencia en Pozuelo de Alarcón y revalidar el reconocimiento en su nuevo local.
A partir del lunes 1 de abril, comenzará a preparar el espacio en el que, con el mismo equipo que le llevó a recibir los principales galardones de la cocina europea, emprenderá una nueva etapa manteniendo el mismo concepto gastronómico.