Tragedia familiar en una finca de los Los Navalucillos, un pueblo toledano de poco más de 2.000 habitantes a los pies de los Montes de Toledo donde un hombre ha muerto minutos después de la medianoche a consecuencia de una herida de bala. Su propio hermano ha sido detenido por su presunta relación con los hechos. 

A primera hora de este sábado, el servicio de emergencias 112 de Castilla-La Mancha ha informado del fallecimiento de un hombre de 79 años de edad "tras recibir un disparo mientras se encontraba cazando". Poco después, la Guardia Civil de Toledo ha confirmado el arresto de su acompañante, pero en ese momento no ha ofrecido más detalles puesto que la investigación sigue su curso con el equipo de la Policía Judicial al frente.

Fuentes conocedoras del caso han asegurado a este periódico que todas las hipótesis apuntan de manera preliminar que se ha tratado de un fatal accidente de caza en el que se han visto implicados ambos hermanos. El fallecido, de 79 años de edad, se llamaba Marcial. El detenido, de 74, Juan.

Este último, ya detenido por un presunto homicidio imprudente, ha sido trasladado por agentes de la Guardia Civil desde la finca de Los Navalucillos donde han ocurrido los hechos hasta el puesto de Torrijos, a unos 60 kilómetros de distancia. Allí permanecerá custodiado  hasta que pase a disposición judicial.

Juan "está completamente destrozado", ha asegurado a este medio en conversación telefónica el alcalde de Los Navalucillos, José Ángel Pérez, después de haber podido hablar con Alejandro, el tercer hermano de la familia, que también se encuentra "muy afectado". 

Cazadores muy experimentados

Pérez ha contado que Marcial y Juan eran solteros e iban "siempre juntos". Según lo que se comenta en el pueblo, lo ocurrido esta noche en el coto de caza 'Las Encarnás', a pocos kilómetros del núcleo urbano, ha sido "una fatalidad"

"Era un paraje muy conocido para ellos, porque tenían una pequeña casa de campo allí. Estaban muy acostumbrados al terreno y cazar de noche. Eran gente muy experimentada y sabían los peligros que conlleva, así que ha tenido que ser un fallo", ha relatado.

Fue el propio Juan el que, a las 00.08 de la noche del viernes al sábado, alertó a los servicios de emergencia de que su hermano estaba herido. Cuando los agentes de la Guardia Civil y una ambulancia llegaron al paraje, ni los agentes ni los sanitarios pudieron hacer nada por salvar a Marcial.

A primera hora de la tarde de este sábado, la Guardia Civil ha señalado a la agencia de noticias EFE que todo apunta a que fue un disparo accidental el que alcanzó a la víctima, que se encontraba en la línea de trayectoria de la bala del rifle disparada por su hermano, quien ha prestado ya declaración por los hechos en el cuartel de Torrijos.