El Gobierno de Castilla-La Mancha ha desactivado este jueves a las 08:00 horas el Plan Específico ante el Riesgo por Fenómenos Meteorológicos Adversos (METEOCAM), que se puso en marcha 23 horas antes ante una previsión de fuertes tormentas, con intensas lluvias y granizos, que finalmente se cumplió en buena parte de la comunidad autónoma. 

Según el balance de incidencias registradas por el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 de Castilla-La Mancha, la provincia de Toledo ha sido, con mucho, la más afectada de la región. Allí se han registrado un total de 71 incidentes, la mayoría de ellos por pequeñas inundaciones y caída de obstáculos a la vía. En el resto de la comunidad los problemas anotados han sido ocho (ocho en Guadalajara, cuatro en Ciudad Real, dos en Albacete y dos en Cuenca). 

Toledo capital se vio sorprendida pasadas las 17:00 horas del miércoles por una intensa tromba de agua y granizo, sobre todo en la zona del barrio del Polígono, donde se registraron balsas de agua, inundaciones en algunas empresas y la caída de un árbol en la vía de servicio de la TO-23, a la altura del Centro Comercial Luz del Tajo.

 

A última hora de la tarde fue la localidad de Consuegra la que se vio afectada por una fortísima tormenta que convirtió a algunas calles de la localidad en auténticos ríos

Previamente, la Policía Local de Consuegra había rogado mediante un comunicado que se abstuviesen "de utilizar vehículos a motor" si se producían embalsamientos de agua "puesto que la circulación de los mismos produce oleajes de agua que hacen que suban de nivel, aumentando el riesgo de que entre en domicilios y establecimientos".

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Entre las incidencias registradas en Castilla-La Mancha destacan el corte de las carreteras TO-3182, en el término municipal de Camuñas (Toledo); la CM-3167 en Herencia (Ciudad Real), y la TO-3091 en el término de Villafranca de los Caballeros (Toledo), debido a balsas de agua en la calzada.

Todas las incidencias se han ido resolviendo a lo largo de la jornada y de la madrugada y en ningún caso ha habido que lamentar daños personales.

Tras este episodio de intensas precipitaciones, se espera que el fin de semana sea muy caluroso en Castilla-La Mancha, con temperaturas rondando los 40 grados en algunas zonas de la región.