La Guardia Civil ha detenido a dieciséis personas, entre ellos los responsables de dos almazaras de Toledo y Guadalajara, en una operación en la que ha esclarecido diversos robos de más de 17 toneladas de aceitunas en explotaciones agrícolas de la comarca de las Vegas de la Comunidad de Madrid, informa este Cuerpo.



Entre los arrestados se encuentran los responsables de dos almazaras, situadas en las provincias de Toledo y Guadalajara, que supuestamente receptaban la mercancía.



Los robos fueron cometidos en explotaciones agrícolas de Valdaracete, Fuentidueña de Tajo, Chinchón, Villaconejos, Villarejo de Salvanés, Colmenar de Oreja y Brea de Tajo.



Se trata de la operación 'Kalabrea' que se inició el pasado mes de enero cuando se recibió en el cuartel de la Guardia Civil de Estremera la denuncia de un agricultor de Brea de Tajo que manifestó haber sufrido el robo de 8.400 kilos de aceitunas en varias fincas de su propiedad.



El análisis de esta denuncia permitió relacionar este hecho con otros similares en los que los propietarios de explotaciones agrarias de la comarca de Las Vegas sufrieron robos de importantes cantidades de aceitunas.

Como consecuencia de los dispositivos de seguridad en estas explotaciones se detectó un vehículo a plena luz del día el pasado 2 de febrero en el que cinco personas transportaban 140 kilos de aceitunas de las que no pudieron justificar su procedencia.



Asimismo, el avance de la investigación permitió llegar a los agentes hasta dos almazaras, situadas en las provincias de Toledo y Guadalajara, donde al parecer recepcionaban las aceitunas.

Registro de almazaras y detección de responsables

Agentes de la Guardia Civil encargados de la investigación, junto con miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de este mismo Cuerpo y personal de la Inspección de Trabajo de la Consejería de Agricultura de Guadalajara y Toledo, registraron las almazaras y detuvieron a sus responsables.



La operación se ha saldado con 16 detenidos y cinco investigados, de entre 20 y 57 años, a los que se les ha intervenido numerosa documentación relativa a la compraventa de las más de 17 toneladas y media de aceitunas.



Además, han sido precintados varios depósitos que contenían más de 600 litros de aceite y se han tramitado sanciones administrativas relacionadas con la seguridad, la sanidad y la gestión de residuos.