La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha condenado la agresión sufrida este miércoles por un funcionario de prisiones del centro penitenciario de Ocaña II, en la provincia de Toledo, protagonizada por un interno "que ya ha mostrado actitudes violentas similares en el pasado".

Los hechos tuvieron lugar por la mañana, cuando el recluso escupió y amenazó a los funcionarios de prisiones del módulo IV. Durante su traslado a aislamiento, el interno continuó amenazando a los trabajadores y llegó a agredir físicamente a uno de ellos, al que propinó un cabezazo.

Tras estos hechos, CSIF reclamado el traslado de este preso a otro centro penitenciario, ya que "Ocaña II no reúne las condiciones de seguridad necesarias para albergar este tipo de internos, por falta de personal y por la escasez de medios adecuados".

Además, el sindicato ha recordado que "es absolutamente necesario el reconocimiento de los funcionarios como agentes de la autoridad", asegurando que "la pasividad de Interior e Instituciones Penitenciarias ante las innumerables agresiones que sufren los trabajadores (una cada 36 horas en el conjunto penitenciarios de España) pone en riesgo a este colectivo".

En la misma prisión, un recluso con graves transtornos psiquiátricos intentó estrangular a un funcionario. En la cárcel de Ocaña I, otro preso agredió el pasado 6 de septiembre a dos trabajadores, en concreto al administrador del centro, que recibió un golpe en un antebrazo, y el subdirector de seguridad, que fue empujado.