El arzobispo electo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, que será el arzobispo número 121 de la Archidiócesis de Toledo, ha manifestado que acepta "con alegría" su nueva responsabilidad, asegurando que es "un regalo precioso del Señor" suceder en el cargo a Braulio Rodríguez.

En un mensaje de saludo escrito, Cerro Chaves ha destacado que es enviado a "una Iglesia llena de historia, de vida y de frutos de santidad, con una gran tradición cristiana, con sacerdotes, religiosos y religiosas verdaderamente entregados a su vocación y laicos que trabajan con alegría e ilusión en la misión de la Iglesia".

"Apoyado en la gracia de Dios y no en mis fuerzas voy a vosotros como padre y pastor, hermano y amigo de todos, aunque siento dejar la Diócesis de Coria-Cáceres en la que he sido tan feliz", ha añadido.