Los ganaderos de la provincia de Toledo han anunciado que reducir el número de cabezas de ganado por falta de recursos hídricos. Asegura que la situación es dramática en zonas como Menasalbas, que aglutina buena parte de la producción de vacuno de carne de España, donde algunas explotaciones han reducido a la mitad sus cabañas ganaderas para adaptarse a la capacidad de unos pozos que, en verano, están muy agotados. En esta zona, en campañas anteriores se recurría al apoyo de pozos municipales, pero el coste de la extracción, con el elevado precio del gasóleo y el incremento de los costes laborales, están llevando a los ganaderos a no recurrir a ellos.

En cuanto a la agricultura, la cosecha de cereal ha caído más de un 30% en la provincia por la sequía. Mientras tanto la vendimia, que se adelantará unos 15 días, se prevé corta sobre todo en el viñedo de secano. El calor ha secado hojas y frutos, afectando la caída de las primeras a la fotosíntesis de la planta y, con ello, a la óptima maduración del fruto.

 Otro de los cultivos afectados por la sequía es el olivar, mayoritariamente de secano en Toledo, con árboles que han conservado poca flor, lo que augura una campaña muy baja. Y a estas pésimas expectativas, se unen los frutos secos, muy afectados por las heladas de abril y, ahora, por la falta de lluvias.

ASAJA reclama infraestructuras de regadío 

La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Toledo ha pedido este martes que se utilicen los fondos europeos para invertir en infraestructuras de regadío en la provincia.

En un comunicado, la organización agraria ha denunciado que la situación del sector agrícola y ganadero es "insostenible" por la sequía y por unos costes de producción "desbocados", al tiempo que ha anunciado movilizaciones de cara al otoño.



Asimismo, ha indicado que los fondos Next Generation financian hasta un 80 por ciento las obras hidráulicas necesarias para acometer mejoras en la red de riego, por lo que ha considerado que debería ser prioritario ante los problemas de agua que sufre la provincia, con consecuencias como la reducción de cabañas ganaderas y el descenso en la producción de los cultivos.



En este sentido, ha reclamado la puesta en marcha de una política hidráulica que "vertebre el país", una política "solidaria" en materia de agua que de soluciones al problema de la sequía, lleve el agua "donde se necesite" y modernice los regadíos existentes.



Según Asaja, es "urgente" que se acometan estas demandas porque la sequía, junto al resto de problemas del sector agrario, está mermando todas las producciones y, con ello, la rentabilidad de las explotaciones.



Ha lamentado que el Gobierno de España "ignore" al sector primario y el "espectáculo de unos fondos europeos que no llegan, en muchas ocasiones, directamente a los productores". Además de que no se llevan a cabo todas las obras hidráulicas que serían necesarias en la provincia toledana, que riega menos del 15 por ciento de su superficie de cultivo y tiene uno de los índices de pluviometría más bajos de España.



Por ello, Asaja ha recordado que se pueden usar los Programas de Mejora de la Eficiencia y Sostenimiento de Regadíos incluidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, lo que a su juicio sería una manera "eficaz" de solucionar un problema real "en lugar de hacer demagogia y políticas restrictivas".

Asimismo, Asaja añade que el agua, siempre con un uso eficiente y controlado de este recurso, es fundamental para producir alimentos y asegurar no solo la rentabilidad del sector primario, sino también la soberanía alimentaria de la sociedad.