Policía Nacional, Policía Local, Protección Civil y Servicio de Bomberos de Guadalajara han suscrito un protocolo de colaboración dirigido a la búsqueda de personas desaparecidas en la capital, el primero de estas características que se establece en Castilla La Mancha, en un año en el que por el momento se han presentado 147 denuncias por desaparición, de las que casi el 100% se han resuelto favorablemente.

El protocolo ha sido presentado este martes por la concejala de Seguridad, Pilar Sánchez; el comisario provincial de la Policía Nacional, Carlos Julio San Román; el jefe de la Policía Local, Jorge López, el jefe de Protección Civil, Vicente Plaza e Ignacio Jiménez, el oficial jefe de bomberos; Ignacio Carvajal por parte de la Brigada de Policía Judicial y la subdelegada del Gobierno, Mercedes Gómez.

Esta actuación conjunta busca la coordinación entre Policía Nacional, Policía Local, bomberos y Protección Civil, y determinar qué se debe hacer y cómo se debe actuar en los primeros momentos, siendo exclusivo para la zona urbana de la capital.

Si bien está enfocado, fundamentalmente, a la búsqueda personas que desaparecen de forma involuntaria, como personas con problemas cognitivos, problemas de salud mental, con discapacidad o enfermedades neurodegenerativas, también está pensado para personas que lo hacen de manera voluntaria, en su mayoría jóvenes, ha señalado la subdelegada, asegurando que los datos actuales "no son muy preocupantes" así como que los esclarecimientos suelen rondar el 95%.

Funciones

Por su parte, Sánchez ha detallado algunas de las funciones de cada cuerpo. Así, los agentes de la Policía Nacional serán los máximos responsables de la intervención, quienes determinen la distribución de los recursos humanos y materiales. Los Bomberos se encargarán de realizar la sectorización del terreno y de determinar los medios que acudirán a cada uno, incluida la Unidad Canina de Rescate, y la Policía Local se ocupará del control del tráfico de los vehículos en la zona y de disponer la Unidad de Drones recientemente creada, y Protección Civil, del control de voluntarios, ha dicho.

Para Sánchez, la colaboración entre instituciones es imprescindible y necesaria para prestar un mejor servicio a la sociedad.

Origen del protocolo

Por su parte, el jefe de la Policía Nacional, Carlos Julio San Román, se ha remontado a una desaparición producida a finales de 2020 como origen de este protocolo, a raíz de las "discordancias" producidas en el proceso de búsqueda. Así, este consenso garantiza poder ponerse en marcha con todas las garantías de coordinación.

También ha apuntado que, si bien en Guadalajara no se han producido desapariciones "inquietantes ni de especial riesgo", si ha subrayado que de las 124 denuncias que se presentaron por desaparición en 2020 se ha pasado a 147 en lo que va de 2021, aunque ha precisado que lo que prima son fugas de menores de centros de acogida o de sus propios hogares y que la pandemia también ocasionó un incremento de la marcha de estos jóvenes de los centros.

Sobre el caso concreto de estas fugas, ha señalado que suelen ser menores reincidentes que suelen encontrarse en dos o tres días, asegurando que en el último año no se han producido desapariciones importantes.

Para San Román, este protocolo es la mejor manera de enfocar las búsquedas de personas desaparecidas con la mayor eficacia y ha resaltado la importancia de actuar pronto porque "el tiempo corre a mucha velocidad".