La Diputación de Ciudad Real ha presentado "Legado Quijote", una iniciativa estructural, sostenida y de proyección internacional que pretende convertir al ingenioso hidalgo en una "palanca de autoestima y emblema común" en la provincia.

"Sentirnos manchegos es parte de nuestra identidad. Sentirnos legado del Quijote es un esfuerzo colectivo que merece la pena, porque el Quijote no es solo literatura, es un espejo de lo que somos", ha destacado el presidente de la institución provincial, Miguel Ángel Valverde, durante el acto institucional celebrado en el Patio de Comedias de Torralba de Calatrava.

Valverde ha agradecido la implicación de alcaldes, concejales, asociaciones, empresarios y representantes culturales. A este respecto, ha confiado en que este 420 aniversario del Quijote permita construir "algo sólido, permanente, transversal y orgullosamente manchego".

La vicepresidenta María Jesús Pelayo, impulsora del proyecto, ha desgranado que "Legado Quijote" está conformado por seis áreas de acción: formación de agentes Quijote, maratones deportivos por pueblos molineros, premios periodísticos, encuentros académicos internacionales, acciones con embajadas y programas educativos intergeneracionales.

Este primer año el proyecto llegará a una treintena de pueblos "para mostrar nuestra riqueza cultural, patrimonial y artística", ha subrayado Pelayo.

Pelayo ha hecho un llamamiento a la participación activa ya que "en Ciudad Real tenemos todo lo necesario para liderar un cambio cultural universal".

La alcaldesa de Torralba y diputada provincial, María Antonia Álvaro, ha agradecido que su municipio haya sido elegido para el inicio de esta "estrategia cultural de largo recorrido" que apuesta por los valores de "justicia, esfuerzo, liderazgo y respeto por la humanidad".