Pese a que los caudales de los ríos se encuentran ya en fase de claro descenso tras la finalización del episodio de lluvias que se prolongó durante las tres primeras semanas de marzo, el Gobierno de Castilla-La Mancha no va a desactivar por el momento el nivel 1 del Plan de Emergencia ante Riesgo de Inundaciones (PRICAM).

Eso ocurrirá, según ha avanzado este jueves en Ciudad Real el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, una vez se hayan evaluado los daños producidos por las crecidas de los últimos días en las provincias de Toledo y de Guadalajara.

"Tener el nivel 1 significa movilizar con mayor rapidez todos los medios que están a disposición de la Administración regional, por lo que no tenemos ninguna prisa en levantar ese nivel", ha explicado Ruiz Molina antes de participar en el V Congreso de la Federación de Servicios a la Ciudadanía del sindicato CCOO en Castilla-La Mancha.

El consejero, además, se ha felicitado por el hecho de que la situación esté "mejorando sensiblemente" en ciudades como Toledo y Talavera de la Reina, donde el nivel del río Tajo lleva descendiendo desde el domingo.

Según los datos facilitados este miércoles por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), el número de estaciones de aforo que superan el umbral de aviso hidrológico rojo (situaciones hidrológicas muy peligrosas con probable inundación de zonas habitadas y cortes de vías de comunicación importantes) bajó de 20 a 12 respecto al día anterior.