Este jueves está previsto que las Cortes de Castilla-La Mancha aprueben la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 2024 donde se recoge la recuperación del llamado canon ambiental del agua. Este tributo, que el Gobierno de Castilla-La Mancha dejó en suspenso hace dos años escudándose en una coyuntura económica marcada por la guerra de Ucrania y la escalada de la inflación, volverá a entrar en vigor el 1 de enero de 2025 con la salvedad de que los primeros 10.000 litros de consumo estarán exentos y presentará bonificaciones.

Estos han sido algunos de los detalles que ha ofrecido a este respecto la consejera portavoz del Gobierno autonómico, Esther Padilla, en la rueda de prensa donde ha informado de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno en su última reunión.

Padilla ha asegurado que pese a que la tasa quedará aprobada este jueves en el pleno de las Cortes, no se va a aplicar hasta enero de 2025 para desarrollar un reglamento para su aplicación con el fin de aplicar "el menor coste para los ciudadanos".

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La consejera ha recordado que este gravamen es de obligado cumplimiento según la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea con el objetivo de que los que más consumen paguen más para emplear la recaudación en mejoras de las infraestructuras.

Sistema de tramos y bonificaciones

Padilla ha explicado que en Castilla-La Mancha se implementará un sistema de tramos. En el primero de ellos, hasta los 10.000 litros consumidos mensualmente, se estipula una exención en el pago de la tasa, por lo que "habrá muchos hogares que no tendrán que pagarla", ha asegurado.

De igual modo, también se recogerán bonificaciones para familias numerosas, víctimas de violencia de género, personas vulnerables y para vecinos de las zonas rurales escasamente pobladas, así como otras enfocadas a la industria agroalimentaria y a las instalaciones deportivas.

Estas medidas están concebidas con el ánimo de que "la incidencia en el bolsillo de las familias de Castilla-La Mancha sea muy pequeña", ha puntualizado, al tiempo que ha valorado en "un euro y pico" lo que de media aumentará el recibo del agua a partir de 2025 con el nuevo tributo. 

La consejero portavoz, que ha recordado que este canon se cobra actualmente en todas las comunidades autónomas a excepción de Canarias, Castilla y León y Castilla-La Mancha, ha asegurado que el 25% de la recaudación será puesta a disposición de los ayuntamientos para que puedan acometer la renovación de las infraestructuras que componen el ciclo integral del agua. 

Protestas del PP

Una lectura muy diferente a la que hacía este martes el Partido Popular, que calculaba que el canon del agua supondrá un coste de unos 500 euros anuales a un bar, 232 a una peluquería o 2.000 a una bodega.

Para protestar por su implementación, los alcaldes 'populares' de la región están llamados a una concentración este jueves a las puertas del Palacio de Fuensalida, sede del Gobierno regional.

A este respecto, Padilla ha afeado que los dirigentes del PP organicen protestas "para pedir que se incumpla la ley, que se incumpla con Europa y ponernos en riesgo de someternos a sanciones como comunidad autónoma".

En este sentido, ha pedido a los alcaldes 'populares' que "sean sinceros con sus ciudadanos" y les expliquen que la subida del agua en 2024 "nada tiene que ver" con la aplicación del canon del agua y "responde solo y exclusivamente a su decisión".