El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha evitado la equidistancia opinando sobre el conflicto palestino-israelí y ha acusado a la organización paramilitar Hamás de provocar la reactivación de la guerra con su ataque sorpresivo del pasado sábado a Israel.
El dirigente socialista ha pedido "dejarse de ambigüedades y de tonterías" después de que Hamás empezase "a matar a miles de jóvenes que estaban precisamente concentrados en un festival por la paz". "¡Por la paz, por favor!", ha remarcado desde Toledo durante su intervención en la inauguración de la Feria de Artesanía de Castilla-La Mancha (Farcama).
García-Page, de hecho, ha calificado esta actuación de Hamás como "un atentado terrorista masivo, indiscriminado", por lo que ha dicho no entender a aquellos que evitan condenarlo.
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Tal y como ha informado EL ESPAÑOL, la reacción de los principales socios de Pedro Sánchez a estas sobrecogedoras imágenes —con la única excepción del PNV y Junts— ha sido presentar a las víctimas como verdugos. Dirigentes de Izquierda Unida (IU) y Podemos han justificado la masacre perpetrada por los terroristas de Hamás esgrimiendo "el derecho a defenderse" del pueblo palestino y calificando a Israel de "Estado terrorista".
La postura de Sumar ha sido más próxima a la equidistancia: una tibia condena de la brutal matanza, para arremeter con mucha mayor contundencia contra Israel, responsable en última instancia del asesinato de sus propios civiles.
"Israel y Palestina no dejan de ser identidades mezcladas, aunque con mil circunstancias añadidas", ha reflexionado el jefe del Ejecutivo castellano-manchego, que ha añadido: "Las cosas son como son. Independientemente del problema de fondo, que ni se arreglará siquiera con el desenlace de esta batalla, nos va a afectar a todos".
Recuerda a ETA
García-Page ya había asegurado en la víspera que el hecho de que "los terroristas de Hamás se autodenominan milicias" le recordaba "a ETA político y ETA militar". "Es dramático los miles de muertos que se han producido en unas horas como consecuencia de una provocación terrorista", reflexionó.
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, aseguró este lunes que tanto la Policía como la Guardia Civil van a reforzar las medidas de seguridad en determinados puntos de la región como la ciudad de Toledo, donde hay varias sinagogas, a consecuencia del conflicto armado desatado entre Israel y Palestina.
Tierraseca, además, avanzó que se va a prestar "especial atención" en determinadas localidades de Castilla-La Mancha con importante relevancia del judaísmo y con comunidades musulmanas.