El aviso rojo por temperaturas máximas se concentrará este domingo en Aragón, Navarra y La Rioja, por valores que alcanzarán o superarán los 43ºC, en una jornada en la que 15 comunidades autónomas estarán en riesgo importante (naranja) o riesgo (amarillo) por altas temperaturas, según ha advertido la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
En concreto, Zaragoza, Navarra y La Rioja tendrán el aviso rojo. Por su parte, Córdoba, Jaén, Sevilla, Asturias, Cantabria, Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid, Zamora, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Toledo, Lérida, Badajoz, Cáceres, Lugo, Orense, Madrid, Álava, Huesca, Teruel, Guipúzcoa y Vizcaya estarán en riesgo importante, por lo que los termómetros estarán en torno a los 40ºC.
También habrá provincias como Castellón, Valencia, Ibiza, Formentera, Mallorca, Menorca, Cádiz, Granada, Albacete, Barcelona, Gerona y Tarragona que estarán en riesgo por temperaturas cercanas a los 35ºC.
Por lo general, la AEMET prevé que este domingo esté marcado por el predominio de cielos poco nubosos en la mayor parte del país, sin embargo, se espera intervalos de nubes bajas en el litoral gallego y de Asturias, algunas nubes altas en el noroeste peninsular, y nubosidad de evolución diurna en el interior de la mitad norte.
Fin a la ola de calor
La Aemet considera probable que durante el lunes y martes la DANA continúe su desplazamiento hacia el noreste, intensificando la entrada de aire fresco atlántico que incrementaría y extendería los descensos de temperaturas, el lunes al tercio occidental peninsular y el martes a amplias zonas de la Península.
De esta forma, según su previsión, las temperaturas todavía serán anormalmente altas, aunque no tanto como estos últimos días, y el lunes 18 será el último día del episodio de ola de calor.
A partir del miércoles 20 es probable que aumente de nuevo la estabilidad y también las temperaturas pero principalmente en el cuadrante suroeste peninsular.
De esta forma, la península continuará bajo la misma masa de aire, muy estacionaria, que probablemente mantendrá las temperaturas en valores anormalmente altos.