El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado modificar los contratos de mantenimiento de carreteras previstos para este año, a fin de aumentar la cuantía de los mismos un 20 por ciento, con el objetivo de acometer obras de mejora de las vías que se vieron afectadas por el hielo, la sal y la actuación de la maquinaria a consecuencia del paso de la borrasca 'Filomena' por la Comunidad Autónoma.

Así lo ha adelantado este martes en rueda de prensa el consejero de Fomento, Nacho Hernando, quien ha señalado que ese aumento permitirá inyectar 5,2 millones de euros más este año, que se sumarán a los 2 millones de euros previstos, para mejorar la pavimentación de 75 kilómetros de carreteras.

Sin esa modificación solo se podría haber actuado sobre 20 kilómetros, ha destacado Hernando, que ha explicado que uno de los motivos por los cuales la red de carreteras de la región "dio una respuesta de forma rápida" cuando llegó la borrasca, fue porque no se escatimó ni en sal ni en el uso de maquinaria, "lo que contribuyó a deteriorar el estado de las carreteras", debido al raspado y a los roces de las máquinas.

Un "daño inducido a propósito para recuperar la movilidad" que ahora "tiene que tener mejora", ha explicado. De ahí que el Consejo haya decidido aprovechar "el límite máximo que permite la ley" para aumentar los contratos vigentes y poder llevar a cabo más reparaciones.

Hernando ha aprovechado su comparecencia para apreciar que, desde el inicio de la legislatura, ya han sido 302 kilómetros de carreteras los que se han mejorado, por valor de 23,12 millones de euros, lo que ha supuesto actuar en 68 kilómetros de la provincia de Albacete, 60 de Ciudad Real, 55 en cada una de las provincias de Cuenca y Guadalajara y 64 kilómetros en la de Toledo.