Dos jóvenes ciudadrealeños han constituido una empresa en Estados Unidos, junto con otro científico chino y una ingeniera química catalana, que está investigando una tecnología con la que dar solución a la resistencia que producen determinadas bacterias a los antibióticos.
La empresa SynCell Biotechnology Inc, que ha sido registrada como C-Corps en el estado de Delaware, fue creada en abril por el ingeniero industrial Alfredo Cabañero, de Puertollano, por los químicos David Medina, de Puebla del Príncipe, por el también físico chino Junjiang Chen y por la ingeniera química catalana Ada Vernet.
Se trata de una empresa emergente (startup) con la que han patentado una tecnología que permite producir nanomateriales ecológicos y seguros con propiedades antimicrobianas, anticancerígenas y antioxidantes con gran potencial en el campo biomédico, según ha explicado a Efe Alfredo Cabañero.
Asimismo, ha detallado que la investigación que están desarrollando pretende dar solución a la resistencia antimicrobiana, un fenómeno por el que las bacterias se vuelven inmunes a los antibióticos, así como contra cánceres que son quimioresistentes, porque las células cancerosas se resisten a los efectos de los tratamientos, "o lo que es lo mismo, cuando el cuerpo acaba siendo inmune a la quimioterapia", ha aclarado.
La tecnología patentada por este grupo de jóvenes investigadores consiste "en utilizar bacterias como biofábricas, que puedan atacar de manera selectiva la causa de determinadas patologías".
Cabañero ha indicado que todo empezó cuando David Medina, que hacía un doctorado en la Universidad de Boston, descubrió que "tras hacer una nanopartícula a partir de una bacteria, conseguía otra bacteria con una estructura química similar, que podría neutralizar y atacar a la bacteria que pudiera estar siendo nociva para el organismo".
Las bacterias evolucionan y mutan con tal rapidez que cada vez son más resistentes a los antibióticos, ha señalado Cabañero, que ha añadido que ellos consideran que esta tecnología "podría ser la solución que a medio plazo diera respuesta a muchos problemas de salud".
Ahora están separados David y Ada están en Boston, Junjiang está en Nueva York y Alfredo está en Puertollano. Cada uno desde su lugar de residencia continúa trabajando la parcela que le corresponde en la empresa.
Actualmente, aunque están "ralentizados por la crisis de la pandemia de coronavirus", se encuentran en una fase de investigación para desarrollar la tecnología in vitro, que esperan concluir a principios del próximo año, para llegar en cinco años a probar lo investigado en humanos.
Aunque ahora están separados, Cabañero en Puertollano, David Medina y Ada Vernet en Boston y Chen Junjiang está en Nueva York, aunque cada uno desde su lugar de residencia continúa trabajando la parcela que le corresponde en la empresa.