Apenas dos meses después del 28-A, los españoles miran de nuevo hacia el bipartidismo. El galimatías de los pactos postelectorales y la amenaza de un nuevo bloqueo gubernamental han terminado de transmitir al electorado el vértigo de la fragmentación, así que las expectativas demoscópicas basculan hacia el utilitarismo que representan elPSOEy elPP, según la encuesta que publica este domingo el diario El Mundo.

El gran favorecido por esta incertidumbre es, sobre el papel, el PSOE, que dispara su intención de voto en 3,9 puntos con respecto a abril, desde el 28,7% hasta el 32,6%. Se trata de unos niveles de apoyo inéditos para los socialistas desde la época deJosé Luis Rodríguez Zapatero.

El PP, por su parte, sube 2,7 puntos, desde el 16,7% hasta el 19,4%. La encuesta se realizó el 21 de junio, cuando lospopularesya habían amarrado algunas de las principales alcaldías, comoMadridyZaragoza, y habían dejado más o menos encarrilados los pactos autonómicos de laRegión de Murcia,Castilla y Leóny laComunidad de Madrid.

La sensación de que el PP salió mejor parado de las negociaciones que Cs se traslada a la intención de voto. La formaciónnaranjacae con fuerza traspactar preferentemente con lospopularesy entenderse con Vox. Pasa del 15,9% al 13,1%. Ese retroceso le hace perder, por sólo una décima, el tercer puesto ante Unidas Podemos, que cae 1,1 puntos y queda en el 13,2%. Vox, por su parte, se deja 2,3 puntos, del 10,3% al 8% de los votantes, un porcentaje en el que pondría en juego muchos escaños al perder la barrera del 10%.