Las últimas semanas están siendo intensas en mensajes, a veces contradictorios, sobre las posibilidades del PSOE y el PP de Castilla-La Mancha de ganar las próximas elecciones autonómicas y municipales y gobernar en la Junta de Comunidades y los principales ayuntamientos de la región. Se publican encuestas y pronósticos, comentarios y rumores, y sondeos internos de los propios partidos que, según la fuente, se dirigen en uno u otro sentido, pero lo cierto es que ninguno de los dos grandes candidatos, el socialista Emiliano García-Page, y el popular Paco Núñez, tienen aún nada ganado y la batalla electoral está muy abierta.

Todos los análisis demoscópicos independientes que se han ido conociendo en las últimas semanas apuntan a un resultado ajustado que puede inclinar la balanza hacia cualquier sitio, aunque siempre dentro de una dinámica favorable a García-Page y sus posibilidades reales de mantener el poder en la Presidencia de Castilla-La Mancha. Al margen de los sondeos internos de los partidos, y que siempre son parciales y de encargo, parece claro que, a siete meses de las elecciones autonómicas, no puede descartarse ningún escenario en el que uno y otro, Page o Núñez, puedan gobernar en la próxima legislatura. A García-Page sólo le valdría revalidar la mayoría absoluta que ahora tiene, ya que no puede contar con ningún socio de gobierno si se confirma la desaparición de Ciudadanos, mientras que el PP de Núñez podría sumar escaños con Vox y terminar por conquistar el Palacio de Fuensalida.

En este sentido, Paco Núñez está totalmente volcado en sus posibilidades y sólo traslada optimismo a su entorno, confiado en que finalmente la balanza se incline de su lado. Fuentes populares consultadas por EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM aseguran que Núñez tiene una gran confianza en sus posibilidades y que “sale a ganarlo todo”, no sólo en la Presidencia de la Junta sino también en los principales ayuntamientos de la región y en la mayoría de los pueblos. Pese a lo que pueda parecer sobre una hipotética victoria de Page, el entorno de Núñez trabaja sobre un escenario en el que “todo es posible”, más aún cuando el PP está viviendo un momento ascendente bajo el liderazgo nacional de Alberto Núñez Feijóo.