Con la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia nacional del PP y el triunfo incontestable de Juanma Moreno en Andalucía a continuación, los dirigentes "populares" han recuperado el alliento y en el partido se han instalado una sensación de triunfo que consideran imparable, sin techo posible. El ambiente de euforia se ha apoderado también del PP castellano-manchego, cuyo presidente, Paco Núñez, se muestra cada vez más convencido de que puede llegar a gobernar en la región el próximo año.

Tal como ya ha informado EL DIGITAL CLMPaco Núñez, ha sido entrevistado este jueves por Federico Jiménez Losantos en esRadio, donde el político albaceteño ha exhibido una clara estrategia: presentar a García-Page como alguien que aparenta ser moderado sin serlo. Además, ha asegurado que aspira a ganar los comicios del próximo año para "construir una alternativa al socialismo para Castilla-La Mancha e implementar otro modelo en la región".

Algo que ha llamado la atención han sido las dudas de Paco Núñez respecto a la candidatura de Page en 2023 al insinuar que el candidato podría ser otro, en este caso otra. El político almanseño ha comentado que cuando llegue el momento de las elecciones municipales y autonómicas de 2023 confrontará contra el actual presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, o con la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, y ha asegurado que lo que tiene "claro" es que se va a "enfrentar al socialismo le ponga cara Page o Rodríguez".

No es el único que lanza esas insinuaciones sobre el futuro político de Page, aún a sabiendas de que hoy por hoy, igual que dentro de un año, sopena de que ocurra algún percance inimaginable, el único candidato socialista es el presidente de la región. Y en caso de que por alguna extraña circunstancia no lo fuera, no está nada claro que la sustituta vaya a ser la actual ministra portavoz del gobierno nacional y exalcaldesa de Puertollano, Isabel Rodríguez. Pero insistimos, y lo saben los que propagan dudas sobre Page, la posibilidad de que haya otro candidato que no sea él ni siquiera se plantea en el PSOE. Ni en la madrileña calle de Ferraz ni mucho menos en el número 2 de la toledana calle de Santa María la Blanca.