El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, ha pedido la intercesión de San Ildefonso para que todas las personas “puedan vivir en paz en este mundo de guerras y de conflictos”. Lo ha hecho durante la homilía que ha pronunciado en la Misa celebrada en la catedral de Toledo con motivo de la festividad del patrón de Toledo.

Cerro Chaves, que definió a San Ildefonso como “peregrino de Esperanza”, concelebró la eucaristía acompañado del obispo auxiliar de Caracas, Carlos Márquez y su homólogo en Toledo, César García Magán y los obispos eméritos de Segovia y Albacete, Ángel Rubio y Ángel Fernández Collado, respectivamente.

El arzobispo de Toledo destacó además el papel histórico de Toledo como un lugar clave para la comunión eclesial, recordando su legado como sede de importantes concilios y sínodos. En este contexto, subrayó la importancia del actual proceso sinodal de la archidiócesis, que busca reforzar la unidad entre los fieles. “San Ildefonso fue un modelo de comunión y de escucha”, afirmó.

“Que sepamos escuchar a quien tanto nos ama y que en esa escucha también escuchemos el sufrimiento, los dolores, las esperanzas de todo ser humano; que seamos capaces de tener esa doble escucha de la que tanto habla el Papa”, aseguró el arzobispo de Toledo, que también encomendó a San Ildefonso la protección el Sínodo Diocesano, el seminario y los grandes proyectos de la archidiócesis.

El arzobispo también puso de relieve durante su homilía que Toledo tiene una de las raíces más antiguas de la devoción a la Virgen María, mencionando la tradición que narra cómo la Virgen impuso la famosa casulla a San Ildefonso.

A la celebración eucarística, que se realizó por el rito hispano-mozárabe, una de las joyas del patrimonio inmaterial de la archidiócesis que luce en sus fiestas más señaladas, asistieron el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, la presidenta de la Diputación, Conchi Cedillo, la vicealcaldesa, Inés Cañizares, así como una representación de todos los grupos municipales salvo el de Izquierda Unida-Podemos. Asimismo, hasta la catedral se acercaron representantes de las Fuerzas y Seguridad del Estado, de la Academia de Infantería y de la Judicatura.

Minutos antes de la ceremonia religiosa, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha felicitado a los toledanos en un día "para celebrar Toledo". “Es uno de los pocos días en los que me puedo autofelicitar", aseguraba Page, que calificaba la celebración de históricamente "tranquila y serena". En declaraciones a los medios, García-Page resaltaba que el festivo de San Ildefonso se haya podido compatibilizar en los últimos años "con la posibilidad de aupar a fiesta regional el Corpus Christi, que es una fiesta con gran repercusión nacional y también aquí en la región", informa EFE.

Tras finalizar la misa, fieles y autoridades, encabezados por el arzobispo se trasladaron a la capilla de la Descensión para venerar las reliquias del patrón de la ciudad.