La Federación de Empresarios de la Comarca de Puertollano (FEPU) ha pedido a la Administración ayudas urgentes para los profesionales que "por imperativo legal" se han visto obligados a cerrar sus establecimientos.



Se trata de bares, restaurantes, cafeterías, pubs, gimnasios, cines, casinos o tiendas ubicadas en galerías no comerciales de grandes superficies, considerados sectores "no esenciales" y que "se están viendo abocadas a la ruina", ha advertido FEPU en una nota de prensa.



Ante esta situación, la organización empresarial ha demandado ayudas concretas y directas de apoyo a estos autónomos, pymes y microempresas, que según ha aseverado "se verán obligadas en muchos casos al cierre definitivo o a la destrucción del empleo de su plantilla si no hay respuesta de la Administración".



Asimismo, FEPU ha criticado la "criminalización" que por parte de las autoridades y algunas asociaciones se pretende hacer de la hostelería, puesto que "han sido los bares y restaurantes los que han adoptado todas las medidas de seguridad que se han impuesto para poder consumir con seguridad en sus locales o terrazas", ha subrayado.



FEPU ha indicado que en Puertollano y en la comarca hay más de 1.000 personas que dependen directamente de la hostelería, entre camareros, cocineros, personal de limpieza o proveedores.