El presidente de la Asociación de Comercio de Artesanía de Toledo, Pedro Espinosa, y miembros de su Junta Directiva han mantenido este miércoles una reunión en Fedeto con su secretario General, Manuel Madruga, y con el responsable del Departamento Económico, Javier Raso, para exponer la difícil situación por la que atraviesa el sector desde el inicio de la pandemia y sus principales reivindicaciones.

La Asociación, compuesta por 125 empresas de la ciudad de Toledo, con una media de antigüedad en la actividad de 30 años, da empleo directo a más 550 trabajadores y a más de 2.200 empleos indirectos, en los que se integran autónomos y trabajadores de otras empresas, principales distribuidores de los productos vendidos por el sector en la ciudad de Toledo, según ha informado Fedeto en nota de prensa.

Desde el inicio de la pandemia, y fruto de las restricciones de movilidad del turismo, el comercio de artesanía ha sido uno de los sectores que prácticamente no han tenido ingresos y que no ha tenido acceso a ayudas. Fundamentalmente esto ha sido debido a que fiscalmente no tiene la condición de empresas turísticas. Algo que ambas organizaciones se proponen cambiar, habida cuenta que el cien por cien de la actividad de estas empresas se dirige directamente al turismo nacional y extranjero.

La situación económica del sector es "agónica". En 2020, su facturación cayó un 92%, pero en 2021 está siendo del cien por cien durante el mes de enero. Se da la circunstancia de que el 8% facturado en 2020 lo fue gracias a los meses de enero y febrero, en los que todavía los turistas llegaban a la ciudad, si bien ese nivel de facturación fue de un 40% menos que en los mismos meses del año 2019, porque en esas fechas ya se padeció un notable descenso del turismo internacional procedente de países que se vieron afectados por la pandemia antes que España.

Las previsiones más optimistas indican que, si la vacuna fuera efectiva a partir del segundo semestre del año, las pérdidas económicas del sector en 2021, en comparación al año 2019, sería del 83%.

En esta situación, el 62% del sector podría verse abocado al cierre de sus negocios, es decir, 6 de cada 10 empresas quebraría y con ello se destruirían sus puestos de trabajo y los pequeños artesanos proveedores del sector desaparecerían.

La Asociación y Fedeto van a solicitar reuniones a las tres administraciones públicas, local, autonómica y nacional, con el objetivo de dar a conocer su situación y de plantear un plan de ayuda específico para el sector.

Según Pedro Espinosa la situación es "catastrófica" y requerirá de un plan conjunto con todas las administraciones públicas competentes, para poder ofrecer las soluciones urgentes que necesita el sector. Por su parte, Manuel Madruga ha garantizado a la Asociación el apoyo de Fedeto. Ambos representantes empresariales han establecido un programa de trabajo que empezará a materializarse desde mañana mismo.