La economía de Castilla-La Mancha caerá un 8,8 % en 2020 debido al impacto de la COVID-19, siete décimas menos que la media española, según las estimaciones de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas).

Castilla-La Mancha está en el grupo de comunidades autónomas donde menos se reduciría el Producto Interior Bruto (PIB) regional, junto a Extremadura, Castilla y León, La Rioja y Andalucía.

Paradójicamente, cuanto más débil sea la estructura productiva de un territorio, menor será el impacto de la crisis, siempre y cuando el turismo no represente una actividad predominante, ha explicado Funcas.

Es decir, los territorios menos perjudicados serán los que tienen un peso elevado de las administraciones públicas, así como las regiones con una industria de menor contenido tecnológico o menos orientada a las exportaciones.

Todas las comunidades autónomas se han visto afectadas por la pandemia, si bien el impacto territorial ha sido desigual puesto que depende de la dinámica sectorial y la crisis no ha afectado en la misma medida a todos los sectores, ha indicado Funcas.