El Formac Villarrubia recibe este domingo al Cádiz B con necesidad de ganar al equipo gaditano a pesar de las numerosas bajas que tiene en la plantilla, por lo que tendrá que recurrir a jugadores juveniles.

El entrenador del Villarrubia, Javi Sánchez, ha explicado a Efe que solo dispondrá de 14 jugadores, dos de ellos porteros, para el partido correspondiente a la jornada decimonovena del Grupo IV de Segunda División B, que se juega el domingo a partir de las 12:00 horas en el Nuevo Campo, dirigido por el madrileño Pérez Muley.

Sánchez ha indicado que están sancionados Dieguito y Víctor Algisi, que se unen a las lesiones de Nacho, Arroyo y Fran Cortés, las grandes dudas de Toni Seoane, operado de la mandíbula (pero que quiere jugar con un protector facial), más las bajas de Carlos Martínez, en la recta final de la recuperación de un pinchazo muscular y Nando Copete, con problemas en el hombro.

Para paliar estas bajas y en espera de la llegada de nuevos efectivos en este mercado de invierno, Sánchez volverá a contar con dos juveniles, de 15 y 16 años, "con cualidades y que vienen entrenando con el primer equipo y uno de ellos, ya debutó en la ciudad deportiva del Sevilla", ha apuntado el técnico.

Pero a pesar de estos grandes inconvenientes, ha asegurado que pelearán por los puntos que se ponen en juego, por la urgencia que tienen de puntuar y de mostrase más sólidos en casa, que es "por donde debe de pasar asentar el proyecto en este categoría de Segunda B".

El técnico ha considerado fundamental tratar de cambiar la dinámica de resultados, sobre todo en su campo y ha asegurado que "los que jueguen lo darán todo", en un partido que será "complicado", aunque cree que tendrán opciones, si están acertados de cara a portería y "minimizan" errores.