Mari Carmen Sáez Moreno lleva dos décadas dedicada a la docencia y, por segundo año consecutivo, ha entrado en la lista de los diez mejores docentes de España en la categoría de infantil, un reconocimiento que otorgan los Premios Educa Abanca, también conocidos como los 'Goya' de la Educación.
Esta maestra imparte clases desde hace 15 años en el CEIP Cristo del Valle de Fuentealbilla (Albacete) y, si algo la ha llevado a colarse entre los mejores, es su peculiar forma de enseñar. No utiliza libros, sino proyectos inventados y elaborados por ella misma para conseguir un aprendizaje personalizado y adaptado a cada grupo.
"La metodología que yo utilizo parte de los intereses del alumnado, de necesidades, de acontecimientos en la vida de los pequeños, de temas de actualidad, de propuestas... Y lo que esto conlleva, el interés por conocer cosas nuevas y la motivación, hace que el aprendizaje se consolide en el tiempo. Mi objetivo es que comprendan lo que están aprendiendo y que consideren que es útil. Que no solo adquieran conocimientos, sino que haya un enfoque competencial", cuenta.
Lo que Mari Carmen intenta es que cada día sea diferente, con muchas aventuras, con retos y con aspectos por experimentar. Para ello, lo primero que hacen sus alumnos cuando llegan al aula es una "entrada amable" -van dejando sus pertenencias a su ritmo-, después se reúnen en asamblea y hacen diferentes juegos, y otros días salen de excursión o invitan a las familias a clase para llevar a cabo diferentes talleres.
"Me gusta mucho el aprendizaje con el entorno e implicar a las familias y otros agentes en mi aula. Creo que eso enriquece la enseñanza, le da una funcionalidad mayor y hace que los niños tengan muchas ganas de venir al cole porque cada día hay algo nuevo", explica.
Enseñar "de corazón a corazón"
El lema de esta docente es que "la enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón". "Cuando conectamos con las emociones de los niños y les ofrecemos nuestro afecto y nuestra cercanía, el aprendizaje es más duradero. Aprendes mejor con alguien que tiene en cuenta tus intereses y emociones, y que respeta todo eso y valida lo que estás sintiendo día a día, que con una persona que solo se limita a dar una lección", explica.
Mari Carmen cree que lo que falla actualmente en los colegios es el "aprendizaje unidireccional" entre el docente y el alumnado, algo que "está comprobado que no funciona". "Cuando el estudiante solo se limita a escuchar, aprende de manera superficial y no llega a realizar los procesos cognitivos superiores", señala la maestra, que considera que "los niños tienen que tener voz en las aulas y ser los protagonistas".
Se podría decir que lo de esta albaceteña es 100 % vocacional, ya que, además de dar clase en el colegio, también se dedica a la formación de futuros docentes, comparte sus técnicas en un blog y ha escrito dos libros ("Si me involucras, aprendo" y "¿Y si jugamos todos?"). Su truco, rentabilizar mucho el tiempo, organizarse muy bien y, sobre todo, echarle ganas. "Como dice la frase, «si te atreves a enseñar, nunca dejes de aprender». Ese debe ser nuestro lema de cada día", señala.
Y tal vez sea ese lema el que le ha llevado a estar entre los diez mejores profesores de infantil del país, unos premios que reconocen públicamente "la labor de los grandes docentes que viven y disfrutan su trabajo, educan para la vida a su alumnado y se involucran al máximo en todo el proceso educativo, tanto dentro como fuera del aula".