El empate en El Clásico entre el Real Madrid y el FC Barcelona dejó un paso más cerca del título de La Liga al conjunto blanco. Los de Ancelotti fueron casi siempre a remolque en el marcador y, de hecho, tuvieron que empatar hasta en dos ocasiones. 

En un partido muy intenso del conjunto blanco, destacó de manera sobresaliente la figura de Lucas Vázquez. El lateral gallego firmó una actuación soberbia al provocar un penalti y marcar otro gol, mientras que Vinicius, goleador y asistente, fue otro de los futbolistas más destacados.

Lunin: 5

Después de su exhibición en Champions ante el City, cometió un error de bulto en el primer gol del Barça. Calculó mal su salida en el córner y propició el tanto de los culés. No acusó este golpe y el resto del choque recuperó su seguridad.

[El Clásico deja sentenciada La Liga para el Madrid: el Barça no mordió y Bellingham cantó el alirón]

Lucas Vázquez: 10

Impresionante partido una vez más de lateral derecho. Juega poco, pero cuando Ancelotti le reclama cumple con creces. Forzó el penalti que significó el empate, no se cansó de atacar y estuvo impecable en defensa. Por si fuera poco, apareció providencial en el segundo palo para hacer un golazo y poner el 2-2 en el marcador. También asistió en el tercer gol. Sobresaliente.

Rüdiger: 7

Venía de 'secar' a Haaland e hizo lo propio esta vez con Lewandowski. Hizo que el delantero polaco pasara prácticamente desapercibido. Demasiado inmóvil en el segundo gol del Barça.

Tchouaméni: 6

Para volver a jugar fuera de su posición firmó un partido muy correcto. Eso sí, se le escapó Fermín en la acción del segundo gol del Barça y eso le penaliza. 

Camavinga: 4

Fue uno de los jugadores que más sufrió sobre el terreno de juego. Le tocó bailar con Lamine Yamal, y el joven jugador del Barça se convirtió en una pesadilla para él. Yamal le ganó la espalda y le desbordó, evidenciando que el francés estaba fuera de sitio.

[Así fue el gol fantasma de Lamine Yamal y la parada de Lunin que el VAR revisó y no subió al marcador]

Valverde: 8

Fue el ancla del equipo en el centro del campo. Un verdadero pulmón que siempre estuvo en el lugar adecuado tanto en defensa como en ataque. Le dio salida al juego del Real Madrid encontrando siempre la mejor opción.

Modric: 7

Ancelotti le dio la alternativa y le dejó sobre el terreno de juego los 90 minutos. Aguantó bien físicamente, aunque hubo momentos en los que le costó entrar en contacto con el balón por el ritmo del partido.

Kroos: 6

No fue su partido más brillante. Como en los viejos tiempos, acompañado por Modric en el centro del campo, pero les costó hacerse con el control.

Bellingham: 9

Un partido en la línea de las últimas semanas. Algo apagado, justo físicamente en los últimos minutos, pero apareció en el momento providencial para sentenciar El Clásico con su gol. Marcó en la ida en Montjuïc y también sentenció al Barça en el Bernabéu.

Vinicius: 8

Goleador y asistente. Fue el encargado de poner el empate desde el punto de penalti. Jugó acostado a la izquierda, y ahí genero peligro como con el centro que le puso a Lucas Vázquez para el 2-2.

[Así fue el penalti de Cubarsí a Lucas Vázquez que significó el empate del Real Madrid en El Clásico]

Rodrygo: 7

No estuvo tan brillante como en otros partidos. Gozó de una ocasión clara que le regaló Vinicius, pero no acertó a definir. Fue sustituido para darle refresco antes del partido contra el Bayern.

Brahim Díaz: 7

Sigue teniendo el papel de revulsivo. Hizo daño a un Barça que empezaba a estar justo de gasolina en el tramo final y fue él quien lanzó la jugada del gol definitivo de Bellingham.

Fran García: 6

Ancelotti no tuvo más remedio que darle entrada ante el desborde que estaba sufriendo Camavinga. Con él en el terreno de juego, Lamine Yamal ya no se marchó tan fácil y el Barça generó menos peligro.

Militao: 5 

Sigue recuperando sensaciones poco a poco gracias a los minutos que le sigue dando Ancelotti. Entró en la segunda mitad y eso le permitió a Tchouaméni adelantar su posición.

Joselu: sin clasificar

Entró en los instantes finales para dar algo de aire al ataque. Aunque tuvo poco tiempo, su movimiento en el gol de Bellingham fue decisivo.