Brahim Díaz ha llamado a la puerta del Real Madrid. El futbolista malagueño estrenó titularidad en su vuelta al conjunto blanco y lo celebró con un gol ante su afición. Aprovechó su oportunidad, lo más importante en un club que no espera a nadie, y demostró que está preparado para aportar mucho en este equipo.

Ante la UD Las Palmas Brahim fue el mejor sobre el verde. El español, con la misión de reemplazar a Bellingham, fue el mejor de los 22 futbolistas sobre el césped del Santiago Bernabéu. Fue el encargado de imprimir velocidad al juego de los de Ancelotti en el primer tiempo, se asoció con todo el mundo y cerró su gran actuación con un gol. Su primero en esta nueva etapa y su tercer tanto con la elástica blanca.

Brahim fue el gran generador de un equipo que disparó 18 veces en el primer acto. Tuvo en sus botas un tanto en los primeros minutos, pero un mal control le privó de poder sacar un disparo. El andaluz se redimió, y lo hizo cuando más lo necesitaba su equipo con un gol en el descuento de la primera parte. Recibió un balón en el punto de penalti y no se puso nervioso. Controló el esférico y sacó un disparo con la pierna derecha que se coló en la portería defendida por Valles.

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La participación de Brahim contra la UD Las Palmas duró 57 minutos. Tiempo suficiente aguantó sobre el verde el '21' del Real Madrid que jugó con el hombro dislocado. Según apuntó José Luis Sánchez, Brahim se lesionó en el Metropolitano y el mismo día del partido ante Las Palmas sufrió un dolor muy intenso. No quedó más remedio que infiltrarle para que pudiera estar disponible para Ancelotti.

Situación atípica

Brahim Díaz está viviendo en el Real Madrid una situación a la que no estaba acostumbrado. En el Milán era una estrella. Fue vital en el Scudetto de los rossoneros hace dos temporadas. Sin embargo, decidió dejar el club que le lanzó al estrellato y donde lo jugaba todo para volver al Real Madrid y demostrar su valía.

En el club blanco nadie te regala nada y hacerse con un hueco dentro del once titular es muy complicado. Brahim era consciente de ello y en este primer tramo de la temporada le ha tocado vivirlo en primera persona. 

Hasta el encuentro ante la UD Las Palmas el atacante malagueño tan solo había disputado 45 minutos. Nueve de ellos fueron en el debut en Champions ante el Unión Berlín y el resto se repartieron entre cuatro partidos ligueros.

Momento en el que Brahim no logra rematar ante la salida de Valles REUTERS

Esta vez, Ancelotti le dio la oportunidad y el canterano del Málaga no la desaprovechó. Marcó el gol más importante del partido y se fue ovacionado por toda la parroquia del Bernabéu. "Solo puedo agradecer a la afición porque he tenido una acogida increíble, un cariño excepcional y estoy muy contento de estar en casa y de jugar para este escudo", declaró Brahim tras el partido.

Esta actuación eleva la importancia del jugador en la plantilla. Ancelotti confirmó en rueda de prensa que "va a ser un jugador muy importante para nosotros", algo que en este tramo de la temporada se puede hacer realidad. La vuelta de la Champions y jugar cada tres días obligará a Ancelotti a rotar con más asiduidad. Ahí, en ese escenario, Brahim podrá seguir demostrando que está preparado para ser una pieza importante en los esquemas del italiano.

Encaje en el sistema 

La figura de Brahim Díaz puede tener un encaje perfecto dentro de la estructura de Ancelotti. Ya sea en el 4-4-2 en rombo o en el clásico 4-3-3 el malagueño puede ser una pieza más que útil. 

El 4-4-2 es el sistema que más está utilizando el italiano en esta temporada. La ausencia de atacantes y la sobrepoblación en el centro del campo ha obligado a Ancelotti a apostar por este dibujo. Ahí, Brahim tiene cabida en varios perfiles. Puede actuar como la punta del rombo de centrocampistas, pero también puede situarse en la dupla atacante.

Ante la UD Las Palmas jugó en el centro del campo. Deambulando entre la zona de medios y la de delanteros Brahim explotó sus mejores virtudes. En esa zona del campo, llena de piernas rivales, Brahim puede sacar a relucir su gran habilidad técnica en espacios reducidos. Además, su gran giro y su visión de juego se potencian más jugando en la mediapunta.

También puede actuar en la punta del ataque. No como referencia, pero sí como delantero móvil. Su gran visión táctica del juego le permite saber cuándo debe desmarcarse, en que dirección o si deber bajar a recibir. Siempre elige la mejor opción. 

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Además, Brahim también puede ser útil en un esquema de 4-3-3. En ese caso, acostado al lado derecho puede ser un futbolista muy dañino. A pesar de no ser un jugador excesivamente veloz, su habilidad con el balón le es suficiente para sortear a sus rivales y ser una amenaza constante.

Sin embargo, su mayor virtud reside en su gran manejo de las dos piernas. Brahim es ambidiestro y eso le da un plus a su juego. Nunca sabes si te va a salir por dentro o por fuera. Si opta por el desborde en banda tiene la capacidad de poner un centro con la pierna derecha. En cambio, si decide meterse hacia dentro y trazar una diagonal puede utilizar ambos pies para asociarse con sus compañeros.

El tiempo dicatará sentencia con Brahim y su futuro en el Real Madrid. Lo que está claro es que el joven futbolista andaluz de 24 años se ha ganado una nueva oportunidad en el once titular de Carlo Ancelotti.