La final de Copa del Rey dejó gran cantidad de imágenes para el recuerdo. Desde los goles del Real Madrid para alzarse con un trofeo que se les resistía en las últimas temporadas al inconmensurable apoyo de la afición de Osasuna a sus jugadores, sin embargo, hubo una de ellas marcada por la polémica. Fue la celebración de Vinicius en el gol segundo gol blanco frente a Lucas Torró.

Una escena fruto de un pique habitual en el terreno de juego a la que se le dio mayor importancia de la habitual. Sin embargo, todo quedó en nada tras el pitido final y la victoria del Real Madrid. En el regreso a los vestuarios, Lucas Torró se quedó esperando a Vinicius en el túnel y allí se produjo un emotivo reencuentro.

El centrocampista de Osasuna y el extremo del Real Madrid se intercambiaron las camisetas de manera amistosa. Además, conversaron durante unos segundos y demostraron que todo fue fruto de la tensión acumulada sobre el césped, ya que los dos equipos se jugaban un título de vital importancia como es la Copa del Rey.

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Tras intercambiarse las camisetas, Vinicius y Torró se despidieron con un choque de manos y un abrazo para confirmar que todo se había quedado atrás. Una vez más, la deportividad volvió a hacer acto de presencia en el fútbol, zanjando así lo que parecía una jugada llena de polémica.

La euforia del segundo gol de Rodrygo marcado en la recta final del partido provocó un momento de euforia en la plantilla. El tanto del propio Lucas Torró había sorprendido al Real Madrid poco antes y eso hizo que el jugador brasileño se dejase llevar por sus emociones en un momento de tal tensión.

Vinicius alienta a la grada. EFE

Show de Vinicius

Sin duda alguna, más allá de ese gesto, Vinicius se convirtió en uno de los nombres propios de la final de Copa del Rey. El extremo del Real Madrid comenzó a la decantar el partido a favor de los blancos desde prácticamente el primer minuto. Suya fue la jugada que dio origen al gol inicial de Rodrygo. Tras marcharse de gran parte de la defensa de Osasuna, puso el balón atrás para que su compañero superase al meta rival.

También fue actor principal en la llegada del segundo gol. Vinicius volvió a hacer de las suyas por el costado izquierdo dejando atrás a los jugadores que le salían al paso. Una vez llegó a la línea de fondo puso un centro que no acertó a despejar la defensa rojilla. El esférico le cayó a Kroos y Rodrygo aprovechó el rechace del disparo del alemán para certificar la victoria del Real Madrid.