Karim Benzema está de enhorabuena. Después de muchos años de intenso sufrimiento, por fin tiene la confirmación de que regresará a un Mundial con la selección francesa. Ya despreocupado de sus compromisos con el Real Madrid, ha podido darse un baño de masas con la que también es su afición, la del Olympique de Lyon. El jugador galo ha acudido al Groupama Stadium, históricamente conocido como Gerland, para ofrecer el Balón de Oro. 

El delantero del Real Madrid se crio en la casa lionesa y por eso ha querido aprovechar esta oportunidad para compartir su premio con una hinchada que todavía le quiere y le idolatra como si siguiera defendiendo los colores de su equipo. No lo hace en el campo, pero sí los lleva cada día en su corazón. 

Por ello, en el partido de la Ligue-1 previo al parón por el Mundial que el Olympique de Lyon disputaba contra el Niza, Karim Benzema saltó al terreno de juego para mostrar el premio conseguido el pasado 17 de octubre en París. El choque se detuvo con motivo de la llegada del descanso y ese fue el momento que el delantero y el club galo aprovecharon para organizar este bonito acto. 

El regreso soñado

Todo el Groupama Stadium se cubrió de flashes para iluminar en la estrellada noche francesa a su astro más brillante. El club aprovechó también para lanzar varios contenidos audiovisuales en favor de Karim Benzema de cuando jugaba con la camiseta del Olympique de Lyon. Sus mejores goles y sus acciones más brillantes siendo todavía una joven promesa. 

Fueron precisamente esas hazañas las que llevaron a despertar el interés de los mejores equipos de Europa. Y especialmente del Real Madrid. Uno de los fichajes más importantes de la historia del club y que tuvo que cerrar Florentino Pérez en primera persona acudiendo por sorpresa a la casa del jugador. 

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El presidente del Real Madrid consiguió su objetivo y tras años de esfuerzo y dedicación, Karim Benzema se ha coronado como el mejor futbolista del mundo tras una temporada en la que ha ganado La Liga, la Champions y la Supercopa de Europa con el club de su corazón. Ahora, su siguiente reto será intentar levantar la Copa del Mundo con Francia. 

Benzema tuvo en el Groupama Stadium el recibimiento que merece una estrella de su calibre. Con fuegos artificiales, juegos de luces y una afición entregada. Además, otra leyenda del club como Bernard Lacombe fue el encargado de hacerle entrega de este premio como ya sucediera hace unos días en el Santiago Bernabéu. 

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En aquella ocasión fueron otros dos ganadores del premio como Luka Modric y Zinedine Zidane los encargados de hacer jefes de ceremonia, dándole su galardón a Karim para que este lo levantara al cielo de Madrid. Aquel día el Santiago Bernabéu se entregó a su estrella como ahora lo ha hecho la hinchada del Olympique con el que consideran su hijo pródigo aunque solo vuelva de visita. 

"Es extraordinario volver, que el Real Madrid me haya permitido estar aquí, y cumplir este sueño. Compartir el Balón de Oro con la gente de Lyon. Ha sido un momento excepcional. Es mi vida, el club que me ha permitido cumplir muchos sueños. Venir esta mañana, con los aficionados, ha sido magnífico". 

Benzema se mostró encantado con su fiesta y además lució su gran relación con el presidente del club, Jean-Michel Aulas, una persona que es muy cercana también al máximo mandatario del club blanco, Florentino Pérez. Ambos le invitaron en su día a la recepción del Balón de Oro en París para que disfrutara del momento 'en familia'. 

Karim se incorporará en breves días a la concentración de Francia en Clairefontaine y por ello habló también de su deseo de ganar la Copa del Mundo: "Ganar el Mundial sería un buen regalo de cumpleaños. Tenemos ambición, vamos partido a partido. Tenemos un buen grupo. Estoy al 100%, he tenido un pequeño problema pero nada grave. Estoy en forma física y mentalmente".