Tras cerrarse el mercado de fichajes de este verano y saber que se quedaría un año más en el Real Madrid, Marco Asensio ha mandado un mensaje en sus redes sociales: "Preparado".

Un mensaje corto pero contundente en el que da buena cuenta de que va a volver a intentar la campaña 2022/2023 lo que hasta ahora se le ha resistido, triunfar sin peros en el Real Madrid. Y es que cuando todo parecía indicar que Asensio cogería la puerta de salida en los últimos días de agosto, finalmente no llegó ninguna oferta a Valdebebas por el mallorquín.

Ahora sabe que parte como suplente para Ancelotti y, por lo visto ahora, con pocos minutos. Tendrá que ganarse desde los entrenamientos y desde el partido frente al Betis un lugar de importancia en un equipo en el que ha ido de más a menos desde que llegó en 2016.

Sabe además que tendrá que convencer a Ancelotti en el campo y al club fuera de él, porque su contrato expira el 30 de junio de 2023 y de momento el club no le ha ofrecido la renovación. Una situación incómoda que ya se preveía a principios de verano, al igual que ocurría con Dani Ceballos.

Cuando llegó el mes de julio y con él la pretemporada, Asensio ya quería ser importante para el equipo y demostrar que podía ser el futbolista titular en la banda derecha del ataque del Real Madrid. Pero hay varios impedimentos por el momento para que eso pase.

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Ancelotti ha demostrado una mayor confianza en Rodrygo, especialmente en los momentos importantes, y la edad del brasileño (21 años) hace que su capacidad de progresión sea todavía muy alta, algo que ocurrió con Asensio en su llegada al Real Madrid, aunque ahora ya cuenta con 26 años y parece algo estancado.

Aun así, Rodrygo tampoco ha sido un indiscutible y esta nueva temporada la ha comenzado lesionado. Uno de los grandes problemas de Asensio es Valverde. A mitad de la pasada campaña Ancelotti optó por pasar del 4-3-3 al 4-4-2 con la 'CMK' escoltada por la derecha por Fede Valverde.

Valverde, un escollo

El uruguayo demostró ser un pulmón y un apoyo perfecto en los partidos más exigentes para un centro del campo ya veterano. El experimento funcionó y Valverde no se cayó del 'once' titular en el resto del año, tanto que acabó siendo decisivo en la consecución de la Champions, donde además de un gran despliegue físico dio la asistencia del gol de Vinicius.

Un obstáculo grande para Asensio, pero este no se rinde. El jugador balear tiene varias bazas a su favor. A pesar de que su rendimiento el último curso no fue tan bueno como se esperaba, acabó siendo, con 12 goles, el tercer máximo goleador de la plantilla solo por detrás de Benzema y Vinicius.

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Un factor importante en la faceta ofensiva ya que, además, el Real Madrid no ha hecho fichajes en la parcela ofensiva, todo lo contrario, se ha deshecho de varios jugadores: Kubo, Mayoral, Latasa, Bale o Jovic.

Aun así, Asensio sabe que parte por detrás y Ancelotti se lo ha demostrado en los cuatro partidos oficiales que se han jugado hasta ahora. En la Supercopa de Europa frente al Eintracht de Frankfurt fue convocado, pero no disputó ni un solo minuto. En la primera jornada liguera en Almería pasó lo mismo, en la segunda en Vigo saltó al campo para disputar solo ocho minutos con el partido resuelto y finalmente cero minutos en la tercera fecha contra el Espanyol.

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Benzema y Vinicius son los dos puntales ofensivos del equipo y el tercero es Rodrygo, esa es la jerarquía que aparece en el esquema de Ancelotti, pero a partir de ahí se abren las posibilidades, ya que solo están Hazard, Mariano y el propio Asensio.

Mariano no cuenta lo más mínimo, lo sabe de boca del entrenador y del club, que le han explicado que tendrá muy difícil jugar minutos. Aun así, Mariano ha rechazado sistemáticamente todas las ofertas que le han llegado y ha preferido quedarse en Madrid para apurar su contrato, que también acaba en 2023.

Un comodín en ataque

El caso de Hazard es algo especial. Después de tres temporadas lastrado por las lesiones en el Real Madrid, no ha llegado a recuperar el nivel galáctico que demostró en el Chelsea, y este curso parecía el de su redención después de completar la pretemporada sin problemas. Sin embargo, mismo caso que Asensio, apenas ha tenido protagonismo en los partidos oficiales.

Así, Asensio tiene opciones de ser un comodín en ataque para Ancelotti durante este año, ya que es un jugador con gol que puede jugar tanto por las dos bandas como por el centro del ataque.

Marco Asensio, celebrando un gol con la camiseta morada del Real Madrid Real Madrid

Y es que, además de ganarse un puesto en el Real Madrid, Asensio tiene otros dos grandes retos por delante, el primero de ellos el Mundial. Sabe que si quiere estar en la lista de Luis Enrique para la cita qatarí tendrá que jugar minutos, solo quedan tres meses y de su rendimiento en el Real Madrid dependerá su convocatoria con la selección española.

El segundo reto es que si finalmente no se queda en el club blanco la próxima temporada, quiere conseguir hacer un año lo suficientemente bueno como para que le lleguen ofertas atractivas el próximo verano.

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Este mercado ha sido algo decepcionante, ya que contrató a Jorge Mendes este 2022 y, más allá de los rumores, no le han llegado propuestas serias y ni lo suficientemente buenas como para cambiar de aires.

Por lo tanto, es una temporada clave para Asensio, que maravilló en sus dos primeras campañas en el Real Madrid, pero que después fue bajando su rendimiento hasta que se encontró con una grave lesión de rodilla. Desde entonces nunca ha vuelto a recuperar su mejor nivel, ese que encandiló al Santiago Bernabéu y que espera volver a encontrar a lo largo de esta temporada 2022/2023.