El Real Madrid sigue puliendo a las estrellas del mañana, pero una de ellas demostró esta última temporada querer serlo del presente. Rodrygo Goes terminó el curso futbolístico en la cresta de la ola y afrontará la próxima como una campaña fundamental en su proyección. Será su cuarto año defendiendo la camiseta blanca y tiene el ejemplo de Vinicius Júnior en ese mismo tiempo. El ex del Santos quiere demostrar que está al nivel de su compatriota y que puede ser el gran jugador que algunos querían fichar.

La renovación de Kylian Mbappé y su final de temporada le han abierto las puertas de la titularidad. No le importa lo que suceda con Marco Asensio, el club y el cuerpo técnico quieren darle todo el espacio que necesite. Su rendimiento invita a pensar que puede vivir una cuarta campaña como la que ha tenido Vinicius este último año. Si el ex de Flamengo ha sido uno de los mejores de Europa, Rodrygo quiere serlo en esta 2022/2023 que comenzará en menos de un mes.

El carisma que ha ganado dentro del campo también se nota fuera de la cancha. Sus declaraciones, el cariño de la afición y su nuevo estatus en la entidad le acercan a esa denominación de estrella. Rodrygo tendrá en esta nueva temporada todo a favor para convertirse en el jugador que él siempre ha aspirado a ser. La delantera que conformarán Vinicius, Benzema y Goes aspira a entrar en la entidad blanca. Los dos primeros ya demostraron una conexión única y el atacante de 21 años quiere ser el complemento que el club espera para la banda derecha.

[Benzema marca el camino de la planificación del Real Madrid para la delantera]

Los dos brasileños siguen una senda similar. Vini se presentó como madridista en 2018 y Rodrygo llegó en 2019. Ese año es el que marca el estado de uno y otro en la plantilla. El primero dio el salto estelar en el verano de 2021. Empezó siendo suplente ante el Alavés y también contra el Levante. De ahí marcó un doblete y ya fue innegociable su titularidad. Antes había dejado destellos, como ha hecho durante esta temporada 'O Raio'.

Su nombre siempre estará inscrito en la historia de la Champions League de las remontadas. Jugó un total de 2.435 minutos y fue artífice de nueve goles y 10 asistencias en toda la temporada. En cualquier caso, fue definitiva su aparición en la máxima competición continental. Sus cinco tantos, todos ellos en momentos decisivos saliendo habitualmente desde el banquillo fueron trascendentales para que el Real Madrid levantase La Decimocuarta.

Rodrygo Goes muerde la medalla de La Decimocuarta Europa Press

Rodrygo también sabe cómo ganarse al público madridista. Su tuit el día que Mbappé decidió renovar con el PSG dijo mucho, no solo por tener incluso más repercusión que la publicación del equipo parisino en sus redes sociales. El último ejemplo ha sido una entrevista realizada en Brasil en la que ha mostrado su lado más simpático, además de demostrar que nunca dudó en llegar al Real Madrid cuando su padre llegó con dos camisetas a su casa y la otra era la del Barça.

El joven carioca será uno de los grandes beneficiados por la no llegada de Kylian Mbappé. De hecho, puede que no haya refuerzos en ataque más allá del canterano Juanmi Latasa y el regreso del cedido Borja Mayoral, pero ninguno de los dos afecta a Rodrygo. Por todo ello, de cara a la próxima temporada, su objetivo tiene que ser dar continuidad al nivel exhibido en los últimos tres meses de competición para terminar de romper el cascarón a los 21 años.

Futuro blanco

Carlo Ancelotti está encantado con Rodrygo Goes y no lo esconde. El entrenador italiano aseguró que es uno de los tres jugadores que más le ha sorprendiendo en su segunda etapa en el Real Madrid. Lo más importante para que un jugador explote y se consagre, sobre todo cuando se habla de un club tan grande como el Real Madrid, es que el entrenador le dé minutos, confianza y cariño. Para el míster, el futuro del brasileño pasa por el Santiago Bernabéu.

Rodrygo está feliz en la casa blanca. Está adaptado al cien por cien y tiene un gran grupo en el vestuario, formado en su mayoría por el clan brasileño. Su rendimiento le ha valido para que cuente para Tite en la Canarinha. Tiene contrato con el Real Madrid hasta el 30 de junio de 2025 y, mirando el espejo de Vinicius, buscará tener una 2022/2023 de ensueño para firmar la misma renovación que anunciará su compatriota en un par de días.