Zinedine Zidane se caracteriza por ser un hombre calmado, aseado cada vez que abre la boca y por ir siempre, siempre, siempre con una sonrisa en la cara a cada rueda de prensa. Pero cuando se falta parcialmente a la verdad es un humano más. Sobre todo cuando atacan a dos de los valores más prometedores del Real Madrid y, personalmente, dos de sus predilecciones que está mimando con seda: Rodrygo Goes y Vinicius Jr. Por ahí no pasa.

El francés está siendo el encargado de dirigir los primeros pasos en el fútbol profesional de las dos perlas brasileñas blancas. La experiencia tanto como jugador y como entrenador acredita de sobra a Zidane como para manejar con acierto esta situación. Pero aún hay quienes la ponen en duda por el recelo que siempre provocan las comparaciones; una cuestión que en el mundo del deporte, como en la vida en general, es bastante odiosa.

Las primeras jornadas de Ansu Fati y Joao Félix han puesto en duda esta gestión de Zidane. Un partido ha valido para pensar en que el francés no tiene la suficiente confianza en sus pupilos, mientras que Simeone y Ronald Koeman sí. Un solo encuentro ya sido suficiente para que se valore de forma negativa la estrategia del Real Madrid con las jóvenes promesas brasileñas y minusvalorar su futuro. Pero el técnico galo no pasa por ahí.

Rodrygo intenta robar el balón a Aihen REUTERS

Dejando al portugués a un lado, por el hecho de estar marcado por una situación especial por el alto coste que tuvo y no tener rivales en su posición en el Atlético de Madrid, la comparación entre estas perlas de La Liga no es tan insultante como se quiere establecer. De hecho, con Joao Félix hubo críticas por su rendimiento y porque Simeone no apostase por él en Champions de inicio frente al Leipzig.

La confianza de Zidane

La 2019/2020 fue una temporada inusual por la llegada de la pandemia, pero eso no evitó que el plan con Vini Jr y Rodrygo se pudiera completar. Estos dos jugadores partían como piezas complementarias de un equipo en el que Eden Hazard, Gareth Bale, Marco Asensio y Lucas Vázquez partían por delante. Las lesiones y la situación particular del galés fueron favoreciendo los galones para estos brasileños que terminaron el año con una buena cantidad de minutos.

Fueron los jugadores número 12 y 16 en la escala de tiempo sobre el campo, con 1.817 minutos para Vinicius y 1.428 para Rodrygo. Esto quiere decir que el primero de los dos contó más que Isco y Hazard, lastrado por las lesiones, y se quedó a unos minutos de ser el jugador número 11 de la plantilla. A sus 19 años sería considerado el primer recambio de la plantilla. El otro, en su primera temporada y compaginando su presencia con el Castilla, ya era más importante que Bale.

Vinicius, presionado por Andoni Gorosabel REUTERS

Ansu surgió en el arranque de la temporada pasada y ya desde el principio se pedía que fuera uno más de la primera plantilla. Así fue, aunque no tanto como los brasileños. El joven español de 17 años sumó 1.375 minutos, el décimo sexto de la plantilla y por detrás de Junior Firpo o Arthur Melo, jugadores que terminaron el año en el ostracismo. Quizá se vio afectado por la inestabilidad en el banquillo azulgrana con los cambios entre Ernesto Valverde y Quique Setién, pero no se puede hablar de confianza completa en el canterano culé.

Vini, paso adelante

El extremo brasileño había dejado unas altas expectativas en su primer año. Qué hubiera sido del Real Madrid en esa fatídica noche en el Santiago Bernabéu ante el Ajax si no se llega a lesionar de gravedad. Esa cuestión no tiene respuesta posible, pero lo que sí que sirve de ejemplo es el paso adelante que dio en la 2019/2020. Aunque en números puede no resultar demasiado brillante con cinco goles y cuatro asistencias, sus apariciones en momentos clave fueron fundamentales.

Su gran momento llegó en ese Clásico en el Santiago Bernabéu. Vini Jr hizo el primer gol de ese encuentro que ponía por delante al conjunto blanco en Liga. Aunque después se desperdició, es evidente que la ventaja cosechada en ese encuentro fue vital para que, tras el confinamiento, el Real Madrid consiguiera levantar el título del campeonato nacional. En esta competición el equipo merengue tiene dos finales ante el Barça y una de ellas la ganó por su culpa. Por allí Ansu solo apareció nueve minutos.

Vinicius celebra su gol al FC Barcelona REUTERS

Todo el mundo le esperó en la Champions League frente al Manchester City. Su estado físico no era el que Zidane consideró oportuno para afrontar ese encuentro y finalmente no jugó ni un solo minuto. Era su gran momento de la temporada y después de esa actuación en el Clásico no cabía duda de que se habría dejado todo sobre el césped. Lástima que esta temporada tan extraordinaria no haya permitido a los futbolistas estar tan al cien por cien como siempre.

Rodrygo estelar

Sí que estuvo en ese encuentro Rodrygo. El brasileño fue el jugador blanco que más desequilibró y así llegó el único tanto blanco del choque. Una gran jugada suya por banda derecha acabó en la cabeza de Benzema para igualar en ese momento la contienda. Con un poco más de suerte podría haber aportado algo más. Pero esa fortuna le faltó al equipo blanco durante todo el partido. Si no, que se lo digan a Varane.

Pero igual de estelar fue su debut. Ante Osasuna en el Bernabéu tardó unos segundos en convertirse en el primer jugador nacido en el siglo XXI que marcaba un gol con el Real Madrid. Esa noche en la que también marcó Vinicius y se desquitó de la presión que tenía encima porque no había marcado aún en esa temporada, quedó marcada para la posteridad, pero aún podría mejorarlo.

Rodrygo celebra su primer gol con el Real Madrid Reuters

Llegó su estreno en Champions League en el coliseo blanco y subió su apuesta con un hat-trick. Tres goles y una asistencia frente al Galatasaray para dejar claro su potencial anotador. Su aportación en la pasada edición de la máxima competición continental la querrían firmar todos los debutantes de la historia. Ansu, con muchos menos minutos, solo pudo firmar un gol en toda la competición; Rodrygo cuatro. Eso sí, finalizaría la temporada con siete tantos, mientras el jugador del Barça hizo ocho; no acabó tan lejos de Joao Félix, que anotó nueve con 1.000 minutos más sobre el campo.

La calma de Zidane

No es lo mismo triunfar en el Real Madrid que en otro equipo del mundo. Zidane quiere llevarles de la mano, no ponerles toda la presión que supone ser titulares indiscutibles en la entidad blanca, aunque para el francés esa denominación no existe. Vini Jr. y Rodrygo alcanzarán en algún momento el estatus de estrellas y el francés seguro que les está llevando por el camino más rápido, aunque este no sea siempre el más inmediato.

Con 19 y 20 años solo eran estrellas del Real Madrid Sergio Ramos, Iker Casillas, Raúl González y Manolo Sanchís, todos ellos leyendas blancas. Lo que están intentando hacer estos dos talentos brasileños solo ha estado a la altura de cinco, después de que cientos y cientos de jugadores lo hayan intentado. En cualquier caso, la 2020/2021 alberga muchas oportunidades para que Vinicius y Rodrygo sigan demostrando que están para responder a la expectación que generan. Zidane, mientras tanto, está tranquilo con lo que ambos le aportan.

[Más información: La comparación de Vinicius y Rodrygo con Joao Felix y Ansu Fati que enfadó a Zidane]

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