En el Real Madrid hay futbolistas en clara ascensión como es el caso de Rodrygo o Fede Valverde, pero también de otros que parecen ir perdiendo cada vez más y más peso, tanto en los planes de Zinedine Zidane como del propio futuro del club. Es aquí donde entra en juego el nombre de Isco Alarcón.
El mediapunta de Arroyo de la Miel presenta en la actual campaña su versión más desconocida. Sus rayos de luces, que en otros tiempos levantaban a los aficionados de sus asientos, son cada vez más esporádicos y su rendimiento está muy por debajo del que debe proporcionar un futbolista de su categoría.
Zidane se había erigido como su gran valedor en anteriores temporadas. Pero este curso no está siendo el del malagueño. Ni un solo gol y ni una sola asistencia. Y tan solo 225 minutos de los 1440 posibles entre La Liga y la Champions League. Esta versión de Isco Alarcón es totalmente desconocida desde que aterrizó en el Santiago Bernabéu allá por el verano del 2013.
Isco Alarcón frente a Iddrisu Baba y Takefusa Kubo
Precisamente fue en su llegada a la casa blanca y al estadio madridista donde se vio que desde el principio existió una comunión especial entre afición y jugador. Isco fue titular en los primeros nueve encuentros de La Liga, marcando cuatro tantos y dando un pase de gol en ellos. También participó en tres de los cuatro partidos iniciales de la fase de grupos de la Champions 2013/2014.
Es decir, en solo los tres primeros duelos de su primera campaña en el Real Madrid, el '22' blanco ya sumaba más que en los 16 que se han jugado la presente temporada. En los siguientes cursos a aquel de debut con la elástica merengue y antes de que desembarcase Zidane en el banquillo del Santiago Bernabéu, mismo resultado: más minutos y más protagonismo.
El Isco de Zidane
A partir de ahí, mismo guion. Resulta llamativo que incluso en la 2016/2017, que estuvo lesionado y se quedó fuera en los cuatro primeros partidos de la Champions League, en Liga ya sumó en doce encuentros más de 500 minutos. Isco llegó a ser muy importante en el Real Madrid de Zidane, colocándose por delante en la rotación de Bale y ocupando un sitio en el once de gala, también en las finales de la competición europea.
Isco y Kiko Olivas luchan por la posesión
Todo este castillo se ha venido abajo en los últimos meses. Parece que todo comenzó después del cambio en el banquillo de Solari en lugar de Lopetegui, pero una vez Zizou regresó en marzo, el francés no escatimó en oportunidades para recuperar al malagueño. Todo sin éxito. Y es que... algo pasa con Isco.
El '22' ha perdido su sitio y ha sido relegado a un segundo o tercer plano en la actual rotación del equipo merengue. Es su hora. La hora de que reconduzca su situación y se gane así nuevamente un puesto. De lo contrario, su sitio en el Real Madrid corre serio peligro más allá del mes de junio y también poder estar con la Selección en la Eurocopa 2020.
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